La construcción de la primera fase de la promoción de
vivienda protegida del Hacho se dio ayer por terminada
definitivamente con la firma del acta de recepción de la
obra por parte de la Ciudad Autónoma. Tras la celebración de
la Comisión Local de Vivienda, el presidente del Consejo de
Administración de Emvicesa, Francisco Márquez, se reunió a
tal fin con la dirección facultativa.
La construcción de la primera de las dos fases de que consta
a promoción de vivienda protegida (VPP) del Monte Hacho se
dio ayer por concluida con la certificación del final de
obra y su recepción por parte de la Ciudad, mientras que la
segunda se encuentra ya en marcha. La entrega de los 86
pisos, repartidos en tres torres, se produjo tras la reunión
celebrada por la Comisión Local de Vivienda para establecer
los criterios de entrega de los que quedan por adjudicar.
Según explicaron desde la empresa municipal de la vivienda,
Emvicesa, la reunión con la dirección facultativa de la obra
tuvo lugar por parte del consejero de Hacienda y presidente
del consejo de administración de la entidad, Francisco
Márquez, y su director, Antonio López. Durante el encuentro,
se acordó la redacción por parte de los arquitectos, de una
separata del proyecto original para “sin solución de
continuidad”, tal como explicó el consejero Márquez en el
último Pleno de la Asamblea, se construya lo que resta de
promoción. Esta segunda fase constará de un cuarto bloque
con otras 41 viviendas.
Tal como especificó López, una vez recibida la obra y de
forma paralela a la tramitación de las adjudicaciones,
Emvicesa deberá completar el procedimiento administrativo
para la entrega de las viviendas. Tras la firma del acta de
recepción deberá suscribirse el denominado seguro decenal
(que garantiza la obra por un período de 10 años) y
solicitarse la licencia de primera ocupación. A este trámite
le sigue el de calificación definitiva y los de obtención de
los boletines de luz, agua y otros servicios.
Por otra parte, la Comisión Local de Vivienda estableció
ayer los criterios por los que se procederá a la
adjudicación de la totalidad de las viviendas de Protección
Pública (VPP) del Hacho, de las que, tras sortearse las 30
para jovenes menores de 35 años, quedan por repartir, además
de las 18 reservadas a “convenios urbanísticos” de la
Ciudad, las 32 correspondientes al cupo general y las 6 de
minusválidos. Tal como informó al término de la reunión el
gerente de la empresa municipal de la vivienda (Emvicesa),
Antonio López, a instancias del consejero de Fomento, Juan
Manuel Doncel, la Comisión acordó que se diera prioridad, en
el cupo general, a los ciudadanos afectados por
declaraciones de ruina inminente de sus viviendas. A este
criterio se sumará el que tendrá en cuenta a personas en
situación de emergencia social, de acuerdo con los informes
que en este caso evacue la Consejería de Asuntos Sociales,
cuya máxima responsable, Carolina Pérez, estuvo también
presente ayer en la reunión de este órgano colegiado, que
preside el consejero y presidente del Consejo de
Administración de Emvicesa, Francisco Márquez, y en el que
están representados además los Grupos políticos de la
Asamblea.
Cupo de minusválidos
En lo que respecta a los solicitantes con algún tipo de
minusvalía, los miembros de la comisión ratificaron el
criterio, adoptado en las últimas promociones de vivienda
protegida que se han adjudicado en la ciudad, de que su
entrega se lleve a cabo según el mayor grado de
discapacidad, independientemente de que esta sea motórica,
sensorial o psíquica.
En relación con este cupo, el director gerente de Emvicesa
subrayó que si bien el “compromiso” adoptado por la sociedad
pública y la exigencia legal en este sentido, hubiera dado
lugar, en este caso, a la reserva de 3 viviendas (un 5 por
ciento del total), se ha hecho un “esfuerzo” para doblar
esta cifra. De este modo, se entregarán tres viviendas para
discapacitados adaptadas y otras tantas no adaptadas.
Una vez aprobados estos criterios y a partir del momento en
el que se reciba de las consejerías de Fomento y Asuntos
Sociales la información necesaria, el gerente de Emvicesa
confía en que a lo largo de este mismo mes la entidad pueda
proceder a la adjudicación de los pisos. De esta forma, se
estaría en disposición de firmar la escritura pública de
compraventa a partir de septiembre.
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