Óscar Franco, dueño del local Planta Baja cree que esta
iniciativa debería perdurar año a año para neutralizar el
bajón que sufre la hostelería en mayo con las Cruces. A
pesar de todo, Franco considera que la crisis no ha afectado
demasiado al sector y cree que en Ceuta existe un “buen
cliente”, al que le gusta salir a la calle a divertirse. En
cuanto a la comida, será típicamente Planta Baja.
El Planta Baja va a trasladar su bar a la calle Edrissis
(entrada al Paseo de las Palmeras), lugar donde se va a
instalar la Feria del Tapeo este año, del 15 al 19 de este
mes, después de que se haya desechado el Parque Juan Carlos
I y las Murallas Reales (por motivo de los conciertos) para
desarrollar este evento.
Óscar Franco también dio una respuesta positiva a los
organizadores, porque considera que es una fórmula válida
para recuperarse del bajón anual que se sufre en mayo con
motivo de las Cruces. “Hace seis o siete años se hizo esto
mismo en la Gran Vía, fue una feria de día, pero los
feriantes mostraron su recelo, porque les quitamos mucho
personal”, comentó. “En aquella ocasión, nos reunimos unos
cuantos del sector y vimos que teníamos que hacer algo para
combatir a las Cruces de Mayo, que siempre nos quitan mucha
clientela”, agregó.
Óscar Franco dijo que el Planta Baja modificará las tapas
todos los días, aunque apostará por el ‘lomo a la riojana’,
una de las más consolidadas en su bar. Todos los días sacará
entre tres o cuatro, pero está esperando todavía para decir
cuáles serán, ya que el cocinero sigue experimentando para
dar en la clave. Además de las tapas, se servirán entre ocho
y diez montaditos, los mejores que glosan en la carta de
este establecimiento. Para rematar la faena, se ofrecerán
raciones, entre cinco o seis. Recuerden que la caña y la
tapa costarán un euro con cincuenta, precio general para
todos.
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