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Los portavoces de los Grupos Parlamentarios Popular y
Socialista en la Asamblea, Yolanda Bel e Inmaculada Ramírez,
adelantaron ayer que los diputados autonómicos adscritos a
ambos decantarán su voto (en forma de aprobación, rechazo o
abstención) sobre la propuesta de declaración institucional
de UDCE-IU “en función de los argumentos que se expongan
para su defensa y justificación”.
Así lo dijo ayer la también consejera de Medio Ambiente,
quien explicó que los Populares tendrán especial cuidado con
que la aprobación de esta moción “no sirva de base a malas
interpretaciones o se mezcle con otros temas o asuntos que
poco tienen que ver con lo que se va a abordar”. Ramírez
mostró a última hora de la tarde su sorpresa por el hecho de
que la iniciativa de Ali no quedase temporalmente en
suspenso y coincidió con Bel en que, a la vista de la
evolución de los acontecimientos, “el Grupo Socialista debe
conocer el contenido íntegro de la moción antes de adelantar
el sentido de su voto”.
UDCE-IU basa su argumentario en que “el derecho a la
nacionalidad, como todos los demás derechos humanos, es
fruto de la libertad del individuo y nunca puede ser
consecuencia de la imposición” porque: 1) “La relación vital
no puede ser creada artificialmente e impuesta contra la
voluntad de quien tiene otra nacionalidad”; 2) “supone una
injerencia injustificable en los asuntos internos de otro
Estado, especialmente en el vínculo de sus ciudadanos con el
Estado; y 3) “porque es un flagrante quebrantamiento” de la
Declaración Universal de Derechos Humanos y del Pacto
Internacional de Derechos Civiles y Políticos, entre otros
textos.
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