Asimismo, Conesa opinó que, aunque la idea inicial del
Ministerio de Fomento y del PSOE es que esa declaración de
servicio público afecte sólo a la línea de Málaga, también
es necesario acometer la misma medida con la ruta de Madrid.
En este sentido, Conesa subrayó que desde el Gobierno
melillense “nos parece que es igual de estratégica la línea
de Madrid”, ya que tanto el aeropuerto de la capital
española como el de Málaga “son los aeropuertos españoles
más importantes.
De este modo, si Melilla estuviera unida por avión de
servicio público con esas dos ciudades, permitiría a la
ciudad “garantizar la vertebración de cualquier comunicación
con el resto del mundo a través de esos dos aeropuertos”.
Además, el portavoz destacó que el esfuerzo presupuestario
que habría que realizar para declarar ambas líneas como
servicio público “sería muy pequeño”, ya que “no supondría
siquiera el coste de un kilómetro de AVE”.
Complejidad administrativa
No obstante, reconoció las complejidades administrativas que
podría conllevar esta medida, si bien propuso que la
bonificación del 50 por ciento por residencia sea eliminada
en las rutas de servicio público para no incurrir en una
doble subvención a la empresa y al ciudadano, algo que
impide la normativa europea.
A pesar de ello, consideró necesario que se siga
garantizando el derecho a la bonificación del 50 por ciento
hasta el final del trayecto en caso de que el destino final
del viaje no sean Madrid o Málaga.
Así, puso como ejemplo que si un melillense quiere viajar a
Barcelona haciendo escala en Madrid, la bonificación del 50
por ciento no se le aplicaría en el primer trayecto con
destino a Madrid si esta línea se declara como servicio
público, pero consideró justo que sí se le haga el descuento
en el segundo trayecto, Madrid-Barcelona, dado que la Ciudad
Condal era el destino final de ese melillense. Conesa
admitió que esta propuesta entraña dificultades
administrativas, aunque confió en que no fueran un
impedimento para llevarla a cabo.
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