OPINIÓN - DOMINGO, 21 DE JUNIO DE 2009

Una negociación bien llevada

Si todo sale como está previsto la Ciudad Autónoma de Ceuta dejará esta semana, una vez cumplida la visita del vicepresidente Tercero del Gobierno y ministro de Política Territorial, Manuel Chaves, a Ceuta, mañana mismo, y superado el Debate General de las Autonomías del jueves en el Senado, las negociaciones para cerrar un acuerdo bilateral con el Ejecutivo central sobre el nuevo sistema de financiación autonómica. Después de la oferta inicial que le trasladó el Gobierno de Rodríguez Zapatero, que rozaba los 10 millones de euros, el Ejecutivo que preside Juan Vivas espera que en la recta final de las conversaciones el montante anual extra que perciba la Ciudad de la Administración General del Estado en concepto de financiación autonómica pueda crecer al alza hasta un 30%. Ceuta lograría, de esta forma, y a la vista de que hasta ahora recibía algo menos de 40 millones al año, obtener un 25% extra de recursos de este tipo, sin duda alguna mucho más, en términos proporcionales, de lo que seguramente logre cualquier otra Comunidad Autónoma española. Este resultado será sin duda el fruto de las buenas artes con las que tanto el presidente de la Ciudad como el consejero de Hacienda, por parte local, aunque el elogio debe dirigirse tamibén al otro interlocutor, han sabido llevar sus contactos con el Gobierno socialista, obviando los diferentes colores partidistas de cada uno de ellos y mirando siempre por el interés general bajo un principio compartido que hoy reitera el propio Chaves en las páginas de este periódico: ha llegado el momento de la cooperación entre regiones y de que todos los españoles sean iguales, residan donde residan, en lo que al acceso a servicios básicos se refiere. Desde esa óptica es evidente que el Ejecutivo central no podía ser indiferente a los argumentos ceutíes, que nunca se han salido de tono ni de fondo. Ahora sólo resta que nada enturbie el buen ambiente que ha marcado el proceso y que este culmine con un final feliz para todas las partes antes del 15 de julio, pues de ello depende la ejecución de muchos proyectos que no pueden esperar.