En círculos concéntricos. Así se desarrolla, tal como
explica el arquitecto responsable de la Oficina Técnica de
Obras del Príncipe, Javier Arnáiz, el ambicioso Plan de
Urbanización de la barriada. Esta es la forma en la que,
según el argumento del arquitecto, se conseguirá conectar no
sólo las viviendas y dotaciones públicas con los servicios
básicos renovados, sino también a la barriada con su
entorno.
Para lograrlo y desde la puesta en marcha del Plan y de su
oficina de coordinación, se ha comenzado con el desarrollo
de proyectos “exteriores”, como la construcción del nuevo
vial que enlaza la calle Fuerte con la frontera del Tarajal.
A continuación, hace tan solo unas semanas, se inició la
reforma interna de la Agrupación Norte, cuyas
infraestructuras conectan con esta nueva carretera para, a
través de sus instalaciones, regularizar, entre otros, el
sistema de saneamiento, que en un futuro enlazará con las
estaciones de bombeo y a través de estas, con la Estación
Depuradora de Aguas Residuales (EDAR).
A la mejora de las conexiones viales, que arrancó, como todo
el plan, con el arreglo del cruce de Claudio Vázquez con el
puente del Quemadero, uno de los principales accesos a la
barriada, se suman, hacia el interior, proyectos de
rehabilitación como el ya citado para el sector Norte o el
que se acometerá en breve en el centro.
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