Personalidades de los más diversos estamentos de la sociedad
ceutí acudieron ayer a la llamada de la Biblioteca Pública
de Ceuta para rendir, en el bello marco del Patio de Armas
de las Murallas Reales, un sentido y emotivo homenaje al
escritor uruguayo Mario Benedetti, que falleció el pasado 17
de mayo en su casa de Montevideo a los 88 años de edad.
El acto, que comenzó con la interpretación del tema medieval
catalán El canto de los pájaros por parte de Miguel Ángel
Chamorro y Sergio Cobo, miembros de la Orquesta Sinfónica
Ciudad de Ceuta, tuvo también la lectura por la actriz Olga
Martí de la Elegía a Ramón Sije, de Miguel Hernández, “uno
de los dos grandes poemas funerarios” para José Antonio
Alarcón, director de la Biblioteca Pública, junto a las
Coplas por la muerte de su padre, de Jorge Manrique.
Precisamente, Alarcón fue el encargado de leer la carta de
la Biblioteca a uno de los maestros del realismo mágico: “Tú
nos ayudaste a descubrir nuevos mundos (...) no sólo con tus
versos, sino con tu compromiso que te llevó a vivir en el
exilio (...) El amor es el único elemento para afrontar la
muerte (...) Seguiremos leyéndote frente al mar en medio de
la nostalgia”.
Posteriormente, Juan Jesús Vivas y Mabel Deu, presidente y
consejera de Educación, Cultura y Mujer de la Ciudad
Autónoma, iniciaron la lectura de algunos de los grandes
poemas de Benedetti: Viceversa, Apenas y a penas, Corazón
coraza, Hagamos un trato o Ausencia de Dios fueron algunos
de los trabajos que se recordaron, exclamados por 27
personajes de la vida política, social y cultural: María
Jesús Fuentes, Antonio San Martín, Simón Chamorro, Isabel
Valriberas, Juan Luis Aróstegui, José Antonio Carracao,
Susana Román, Ramón Galindo, María Manuela Dolón, África
Totem, doctor Abdelkrim, Mati Miaja, Montse Taboada, Ana
Moreno, Beatriz Palomo, Diego Segura, Higinio Molina,
Mohamed Ali, Jesús Zapico, Vicente Álvarez, Basilio
Fernández, José Mari Silva y Francisco Bombien.
Se escuchó también la voz del propio Mario Benedetti, quien
tuvo la buena idea de dejar grabada su palabra en varios
casetes y cd’s en compañía de Daniel Viglietti o en
solitario.
El acto, que no sólo sirvió, pues, para homenajear al
escritor, sino también para difundir parte de su excelsa
obra, puso su punto final con la interpretación del famoso
Canon, de Pachelbel.
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