Sin cejar en el empeño de buscar la mejor alternativa sin
mover un ápice el modelo de seguridad implantado en el
Polígono del Tarajal en el asunto de los porteadores, la
Delegación del Gobierno ha venido trabajando en estos días
en la mejora del proyecto que le fue presentado por los
empresarios para permitir el acceso tanto de público como de
vehículos. En este sentido, la Jefatura Superior de Policía
ha diseñado, por orden de la Delegación, un proyecto
ampliado y mejorado en el que se contemplan las medidas de
seguridad de las que adolecía primigeniamente el proyecto
elaborado por los propietarios de las naves.
La próxima semana se sentarán en una mesa todas las partes
implicadas en relación al Polígono del Tarajal. ¿La causa?,
será presentado el proyecto alternativo prometido por el
delegado del Gobierno a los comerciantes basado en el
proyecto presentado el miércoles de la pasada semana por los
empresarios que adolecía de medidas de seguridad.
Según ha sabido EL PUEBLO, los técnicos de la Jefatura
Superior de Policía habrían concluido ya, por orden del
propio delegado, el nuevo proyecto que contempla además de
las peticiones de los comerciantes (tráfico rodado y de
personas por el interior del Polígono), los elementos
adecuados de seguridad demandados en su momento por la
propia Delegación basándose en los criterios de los Cuerpos
y Fuerzas de Seguridad del Estado.
Pese a todo lo que ha llovido, y después de la presentación
del proyecto de los empresarios, la Delegación del Gobierno
y los responsables de la seguridad de la Jefatura Superior
han venido trabajando, sin ninguna alharaca, en la
conjugación de medidas tendentes a acercarse a las
peticiones de los propietarios de las naves para que no vean
mermada la producción de sus negocios y, al mismo tiempo,
conservar el decálogo de medidas de seguridad impuestas en
el Polígono relacionadas con los porteadores tras la
dramática jornada de finales del pasado mes de mayo con la
muerte de dos cargadoras.
Seguridad inflexible
La Delegación del Gobierno es inflexible y no permitirá un
elevado número de porteadores en el interior del Polígono
del Tarajal. Se cumplirán estrictamente los horarios que se
vienen aplicando en la actualidad, de tal modo que el acceso
a España por el Tarajal permanecerá cerrado hasta que la
salida por el Biutz no absorba con fluidez a la masa
porteadora. Además no se permitirá un volumen de bultos
superior a la corpulencia de las personas y se evitará el
apelmazamiento en las cercanías del puente. Todo ello
permanece como hasta ahora. Pero se ha logrado conjugar con
el nuevo proyecto, que será presentado la próxima semana a
las partes implicadas, estas medidas con la posibilidad de
disponer de un Polígono abierto tanto al público en general
como al tráfico rodado.
Una suerte de previsiones sobre planos en el que deben estar
implicadas absolutamente, además de la Policía Nacional, con
sus agentes habituales, los servicios de la Ciudad Autónoma.
En este sentido deberá aumentar el número de efectivos de la
Policía Local para la regulación del tráfico interior de
vehículos y de personas, coordinados perfectamente con las
unidades de la Policía Nacional avanzadas en el Polígono
para el control de los porteadores. La Delegación del
Gobierno siempre reiteró en sus manifestaciones la necesidad
de preservar la seguridad de la vida de las personas, por
encima de todo. Y, entendiendo igualmente las necesidades de
los propietarios de las naves, con los que se compretió, ha
elaborado un proyecto definitivo, basado en el presentado
por los empresarios y que está complementado con las medidas
de seguridad de las que adolecía en un primer momento.
Será, por tanto, la próxima semana cuando deban ponerse de
acuerdo todas las partes para que se cumplan las
prescripciones establecidas en este nuevo proyecto. De ser
así, quedará el compromiso tanto de comerciantes como de la
propia Ciudad Autónoma, para que se ponga en práctica de
inmediato aportando, todas las partes, los elementos
necesarios para que pueda llevarse a cabo.
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