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El Gobierno de Melilla aseguró ayer que cumple todas las
normativas existentes respecto a la seguridad en las playas,
de ahí que haya negado que tenga responsabilidad judicial en
la muerte de una mujer y su sobrino que el domingo se
ahogaron mientras se bañaban en la playa de San Lorenzo.
A preguntas de los periodistas, el presidente de la Ciudad
Autónoma, Juan José Imbroda, ha asegurado que desde su
Gobierno “se han tenido todas las cautelas y todas las
obligaciones derivadas de la Ley”, si bien se ha ofrecido a
colaborar “al 100 por 100” con la Justicia en la
investigación que se está llevando a cabo.
Imbroda ha rechazado la reacción de los grupos de la
oposición ante este accidente, especialmente por parte de la
Coalición por Melilla (CPM), a la que ha acusado de hacer
“una política carroñera” al responsabilizar a la Ciudad
Autónoma de lo ocurrido y exigir una comisión de
investigación al respecto.
El presidente melillense ha rechazado llevar a cabo esta
comisión porque “la investigación la tiene abierta un
juzgado de la ciudad, que es el que tiene que investigar y
ver las causas por las que ha ocurrido este accidente”.
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