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El presidente de la Ciudad Autónoma, Juan José Imbroda, negó
ayer el bulo que circulaba por Melilla desde que el pasado
domingo muriera un niño marroquí ahogado en la playa de San
Lorenzo, que apuntaba como causa del suceso que el pequeño
había sido succionado por la draga de la playa, ya que
aquella zona está siendo objeto de unas obras de
regeneración de la costa, muy dañada tras los temporales del
pasado otoño.
Imbroda, en declaraciones a la Cadena Ser, negó que ésa
fuera la razón por la que el niño murió ahogado, ya que la
draga estaba parada desde las 12,45 horas y el suceso tuvo
lugar sobre las 16,30 horas, de modo que “no había draga
funcionando” en aquellos momentos. Además, el mandatario
local puntualizó que “es imposible que la draga succione
como nosotros entendemos que es succionar, arrastrando a uno
y metiéndolo por un tubo”.
Imbroda indicó que este suceso se encuentra en proceso de
investigación por el juzgado de guardia para que compruebe
“las circunstancias que rodean” al caso, si bien el proceso
se encuentra abierto todavía.
No obstante, Imbroda apuntó como causa del accidente que en
aquel momento “se metió un viento de Poniente de cierta
intensidad” que arrastró a los dos niños de 8 y 5 años y a
su tía, de 23, a una zona de baño donde había un desnivel y
les cubría.
“Y si uno no sabe nadar en esos casos, lo pasa mal o se
puede ahogar”, relató Imbroda, quien recordó que esta
situación de peligro se puede producir también en casos en
los que haya viento de Levante, momento en que “se forman
los clásicos hoyos, que no se ven cuando el agua está
turbia”.
Por esta razón, el presidente de la Ciudad Autónoma quiso
pedir a los ciudadanos y usuarios de la playa que “tengan
mucho cuidado, sobre todo cuando son niños pequeños”, ya que
éstos “no son habituales en la zona de baño de las playas”.
Imbroda lamentó lo ocurrido, si bien comentó que “dentro de
la desgracia, la intervención de los bañistas y el servicio
de Salvamento evitaron que no hubiera más víctimas”.
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ejecutivo
