La portavoz del Ejecutivo ceutí, Yolanda Bel, indicó ayer
tras la reunión semanal ordinaria del Consejo de Gobierno
que es voluntad de la Administración local cerrar “esta
misma semana” las nueve naves ‘consigna’ ubicadas en el
Tarajal sobre las que pesan otros tantos decretos ya
rubricados por el consejero de Fomento, Juan Manuel Doncel,
tal y como ayer adelantó este periódico. Además, la
consejera adelantó que durante la próxima semana se
procederá, si los trámites administrativos correspondientes
no retrasan la operación, a clausurar otras nueve naves
dedicadas también solamente a almacenar los bultos que
después trasladan los porteadores durante unas horas o días
a cambio de cierta cantidad de dinero, una actividad que la
Ciudad no regularizará “bajo ningún concepto”.
En su exposición del tema la portavoz gubernamental tildó de
“legítimas” las movilizaciones planteadas por los
empresarios del Tarajal que el lunes se concretaron en una
marcha y sendas concentraciones ante la Delegación y el
Palacio autonómico, pero reiteró que “el Gobierno cree, como
la Administración General del Estado, que el elemento
fundamental e irrenunciable en los polígonos es la seguridad
y el respeto a la integridad física”.
Bel insistió en que las dos instituciones van de la mano con
este criterio, más aún tras la última reunión de
coordinación que siguió a la muerte de dos mujeres
marroquíes en los polígonos. “Allí se aclaró el protocolo de
actuación para evitar tumultos, tarea en la que la Policía
está haciendo un magnífico trabajo y a la que
proporcionaremos vallas para facilitarlo”, dijo Bel, que al
final de la rueda de prensa dijo “desear” que lo que
reclaman los empresarios de la zona sea también “garantizar
la seguridad en el área antes que cualquier otra petición”.
El portavoz de los empresarios, Mohamed Ahmed, aplaudió ayer
la actuación de la Ciudad a la hora de cerrar las
‘consignas’, que a su juicio disparan la llegada de
porteadores (y los colapsos) y favorecen la competencia
desleal.
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