Es como tildan desde Barcelona los
fichajes, y su coste, del Madrid de Florentino Pérez.
Poco tiempo les ha durado la alegría de su “tri-tri-tri”
que, aunque parezca mentira, con estos fichajes del Madrid
parece que el éxito sin precedentes del Barça hubiera sido
hace cien años.
Y es que en la parte norte del Ebro no son capaces de vivir
y disfrutar sus éxitos, importantes, por supuesto, y todo lo
que hace el Madrid lo miran con lupa o con catalejos, por si
acaso pudiera romper la buena marcha del equipo catalán.
Lo más chocante de todo lo que he oído y leído estos días es
lo que Javier Sala i Martín, responsable del área económica
del Barcelona, dice:” No sé de donde salen esos 300 millones
que piensa invertir en fichajes... “. Lo que digo, el
síndrome de madriditis no se les va ni en los momentos más
dulces, y lo que sí están percibiendo es que con Florentino
Pérez en el Madrid se va a volver a desestabilizar el
Barcelona, aunque ahora no “tire” de ninguna de sus figuras.
Pero hay algo que será peor para ellos y es que muchos de
los jugadores de la plantilla del Barcelona, bien pagados
desde luego, van a empezar a pedir subida de sueldo, con lo
que “ya tenemos el lío en casa”.
Aquí y debieran echar la vista hacia atrás, cada uno tiene
que jugar sus bazas y el Madrid con este presidente ni se
deja, ni se va a dejar pisar un fichaje que le interese, por
mucho que el mismísimo Putin salte a la arena para
impedirlo.
Es el punto de apoyo básico. Hace tres meses, el Madrid no
tenía crédito, mientras que en sólo dos semanas la situación
ha dado un giro de 360 grados, y hoy por hoy se ha vuelto a
transformar en la marca por excelencia mundial.
Se pueden quejar lo que quieran en Barcelona, si un jugador
de los que ellos pretenden llega a fichar por el Madrid,
pero aquí hay que vivir el momento y devolverle a cada uno
lo suyo, porque ¿Cuántas veces, desde allí, trataron de
torpedear o encarecer fichajes que pretendía el Madrid?. Una
y una docena de veces.
Cuando les iba bien la economía gastaban a su antojo, no
creo que ahora les vaya mal, pero el pánico que les da ver
la imagen del presidente de ACS hace que los nervios no les
dejen saborear como quisieran su “tri-tri-tri”.
Y no ha hecho más que comenzar el veraneo. Cuando llegue la
competición y el “gallinero” se alborote, ya veremos.
Lo que más gracia me hace, venga del ángulo que venga, es
esa doble moral o querer intervenir en asuntos ajenos,
cuando se habla de que en tiempos de crisis es inmoral
gastarse tantos millones en un futbolista. Está bien, pero
cada uno, en un país libre, puede hacer con su dinero lo que
crea más conveniente, y lo que pague el Madrid no es dinero
público, por tanto ..., sus deudas, si se llega a endeudar,
él las pagará y su economía serán los dirigentes del Madrid
quienes la dirijan. Sin más.
Lo que me llamaría la atención y me avergonzaría es que
fuera dinero público y con ese dinero, lo primero, antes de
hacer un fichaje, se colocara de rondón y se pusiera un
sueldo algún gerente advenedizo, que se metiera ahí por
haberse quedado en paro. Eso hoy no existe en el Madrid que,
curiosamente, sigue vistiendo de blanco, que ha pasado ya
ese mal sueño, y que, otra vez, vuelve a ser el centro de
los clubes del mundo. Así son las cosas.
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