Una vez conocidos los resultados
de las elecciones europeas todos los partidos políticos que
han intervenido, en las mismas, se han reunido para hacer un
balance profundo sobre esos resultados obtenidos en las
mismas.
Y todos ello, sin excepción, habrían encontrado algo
positivo sea cual haya sido el resultado, que por más vuelta
que se le dé, los populares han cosechado un triunfo en toda
Europa aunque, en España, ese resultado no haya sido tan
brillante como se esperaba. Victoria sí, pero no a la altura
de Francia, Italia, Gran Bretaña o Alemania, donde el
triunfo de la derecha ha sido con grandes diferencias sobre
la izquierda.
En España, con cuatro millones de parados, con la crisis que
padecemos y con una política económica que no es para lanzar
cohetes, los populares encabezados por Rajoy deberían haber
obtenido los mismos resultados que las naciones ante
mencionadas, dejando a los socialistas, al menos, a diez
punto de diferencias, abriendo, sin duda alguna, una
importante brecha con miras a la elecciones generales del
2012.
Y que conste que, el Partido Popular, no va a tener las
cosas tan fáciles, para obtener una victoria, como la ha
tenido en estas elecciones al Parlamente europeo.
Siempre lo he dicho y seguiré insistiendo en ello, unas
elecciones municipales, generales o las que sean, me da lo
mismo, siempre las comparé con un combate de boxeo. No se le
puede dar tregua el enemigo a batir, hay que tumbarlo a lona
por la cuenta de diez, ganándole por KO, en el menor tiempo
posible.
Si no se hace así, si se le da lo que en boxeo llaman “el
segundo aire”, tendrá todas las probabilidades del mundo de
recuperarse y ganar el combate, habiéndose perdido una
oportunidad de oro de haberse proclamado vencedor cuando se
tenían todas las ventajas a favor.
De ahí que le presidente del Gobierno esté convencido que la
derrota electoral tiene como única explicación la crisis que
estamos padeciendo, mostrándose seguro de poder revertir
esos resultado sin modificar “el rumbo de su política”.
La pensada moción de censura o las elecciones anticipadas
han quedado sólo en eso, en palabras dichas en momentos de
euforia, pero con la tranquilidad que da el día después,
cuando se analizan en profundidad los resultados obtenidos
en estas elecciones europeas, no se piensa lo mismo y donde
dije digo, digo Diego.
El socialismo europeo ha recibido un gran varapalo en toda
Europa menos en España, donde a pesar de haber conseguido la
derecha una victoria que le ha llenado de satisfacción, pues
una victoria es una victoria aunque sea por la minima y en
el último minuto, no ha conseguido que la misma se ajuste a
lo que en principio se presumía como una victoria holgada,
pues tenían todas las papeletas para conseguirlo.
Cuatro puntos de diferencia, se mire como se mire, son
cuatro puntos, justo para una victoria a los puntos, pero
para nada más. Y uno que es así, en su inocencia se pregunta
¿Le habrán dado los populares, el segundo aire a los
socialistas?.
|