Los hechos denunciados se produjeron el 30 de mayo a las
nueve y cuarto de la noche en el Centro Oficial de la
Jefatura Superior de Policía.
Al parecer, los agentes habían detenido a la acusada ya que
tenía una orden de expulsión de la ciudad anterior a su
detención, ya que no poseía la documentación. Después de
trasladarla a Comisaría, y en el mismo momento en el que una
agente procedió a cachearla, esta inició un forcejeo,
tirando de los pelos a la policía y golpeándola en un ojo
por lo que sufrió varias lesiones, sin querer permitirle que
la tocasen.
Por estos hechos, y a través de la figura jurídica de la
conformidad, la magistrada del Juzgado de lo Penal número
uno dictó sentencia condenatoria contra la acusada que
deberá hacer frente a seis meses de prisión por el delito de
resistencia, el pago de una multa de 60 euros por la falta
de lesiones y abonar la cuantía de 240 euros en concepto de
indemnización a la agente.
La letrada de la defensa solicitó la suspensión de la
condena que se verá en la ejecución de la sentencia.
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