Una veintena de usuarios del Centro Gámez Morón concluyen
esta tarde su acampada anual en el Fuerte de Rostrogordo, en
el que han vivido un completo fin de semana repleto de
actividades de contenido lúcido y medioambiental. La
programación ha incluido desde juegos de campamento a
espectáculos de magia, pintadas con graffitis, senderismo y
clases de aerobic.
Por tercer año consecutivo los usuarios del Centro de
Disminuidos Psíquicos Gámez Morón han podido realizar su
campamento de verano en el Fuerte de Rostrogordo. La novedad
en esta ocasión es que aquellos que tenían una mayor
dependencia se han quedado en el centro y han contado con su
propia programación de actividades lúdicas, según explicó el
viceconsejero de Servicios Sociales, Hassan Driss y la
directora del Gámez Morón, Pilar Carilla. Una veintena de
los usuarios del Gámez Morón participa en la acampada en la
zona de casetas del Fuerte de Rostrogordo. Todos ellos
cuentan con la ayuda de monitores y cuidadores.
La programación se inició el viernes con el reparto de
casetas, un espectáculo de magia y una asamblea preparativa
de las actividades del sábado, que arrancó con un suculento
desayuno para continuar con un recorrido.
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