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El asunto no pinta nada bien. Cuando normalmente la cifra
tan elevada de animales se producía en julio, la protectora
de animales de Ceuta lleva desde el mes de abril recibiendo
cinco nuevas mascotas que los dueños deciden no seguir
cuidando. Denuncian la falta de ayudas y el hacinamiento
como problemas tangentes.
Los ceutíes tiran muy rápido la toalla. Ahora ni siquiera
esperan a los meses de verano para abandonar a sus mascotas.
Este año, las altas cifras de abandono de cinco perros a la
semana se han adelantado a la Semana Santa. “No encontramos
razones. La crisis, la llegada del buen tiempo...pero los
perros están aquí”, explica el presidente de la protectora,
Juan José Tuset.
Y la regla de tres es muy sencilla: abandonan a cinco
animales y consiguen dar en adopción a uno. El resultado es
un hacinamiento en las instalaciones que aún permanecen en
obras tras las inundaciones sufridas este invierno. Se han
agrupado en los patios nuevos hasta que se termine la
reforma de las antiguas perreras. Con los gatos la cosa está
incluso más complicada porque de diez que dejan en la calle
tan sólo vienen a adoptar uno. “Y eso con suerte. Aquí hemos
visto a animales morir de pena cuando se dan cuenta que los
han dejado sus dueños. Dejan de comer, de caminar... es muy
triste”. Tuset cree que los ceutíes deben variar la
mentalidad en temas de protección animal.
Ayudas
La situación geográfica de Ceuta no beneficia la cooperación
entre provincias limítrofes como sucede en otras zonas del
país. “Aquí salen con cuentagotas, esa es la cruda
realidad”, apunta el presidente de la entidad. A la
Protectora de Animales de Ceuta le echa una mano la
Asociación Lara radicada en Madrid que cada mes envía una
docena de gatos abandonados en la Ciudad Autónoma hasta
Suiza. Además, gracias a una asociación francesa han salido
en los dos últimos años cuatro remesas de perros. La próxima
será muy pronto y permitirá dar en adopción a 35 perros.
“Nos es de gran ayuda”, admiten los responsables de la
protectora. Un año en la ejecutiva de la entidad ha dado
para muchas cosas y en el balance destacan desde el
incremento de cuotas a la impecable situación saniitaria de
cada animal, la estancia de una veterinaria en las
instalaciones, la construcción de un quirófano, de una
peluquería canina, un despacho, la creación de una página
web para ayudar en la promoción, información y difusión de
sus tareas. En la página explican además las características
de cada uno de los animales que dan en adopción y cuelgan
fotos para que los interesados puedan hacerse una idea antes
de acudir a verlos y recogerlos. Entre ellos está Barry: un
cruce de Bóxer nacido aproximadamente en el 2000 que fue
adoptado de cachorro por un marinero que lo tenía siempre en
el barco, pero se enteraron de que era maltratado y que
incluso saltaba al agua para escaparse. Fué recuperado por
la protectora y ahora busca de nuevo un dueño al que dar
compañía.
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Los abandonan con más de medio año y todos adoptan cachorros
Son pocos los que se dan cuenta de
que acudir a una protectora de animales no es para buscar
una mascota. Son las mascotas las que buscan familias. La
gran mayoría llegan para encontrar cachorros y la gran
mayoría de los que abandonan animales lo hacen cuando sus
mascotas dejan de serlo. El resultado es que cada año que
pasa hay más animales en la protectora. A día de hoy, en
total 90 perros y 180 gatos. La mejor ayuda para atajar la
situación es ser responsable con el animal y no abandonarlo.
Para ayudar a la protectora, basta con hacerse socio: cuotas
bajas y una ayuda infinita. Eso es lo que transmiten los
responsables de la Protectora de Animales de Ceuta que
recuerdan que la ayuda económica recibida por el
ayuntamiento a través de un convenio ha ido a parar de
manera íntegra a la sanidad de los animales. odos están
vacunados, desparasitados y con las cartillas al día.
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