El próximo 13 de junio se celebrará la Festividad de San
Antonio en la ermita que lleva su nombre. Y como antesala a
esta celebración ayer se celebró una eucaristía y se leyó el
pregón, que este año corrió a cargo de Pedro Mariscal. El
pregonero basó su discurso en tres ejes: la historia del
santo, su experiencia personal y el significado y la labor
que lleva a cabo la cofradía. Mariscal además destacó “el
orgullo” que significaba haber sido nombrado pregonero en la
celebración de este año.
La ermita de San Antonio vivió ayer el primero de los actos
religiosos que está previsto que se celebren con motivo de
la festividad del santo que lleva su nombre y que tendrá
lugar el sábado. Y es que se celebró una eucaristía y se
leyó el tradicional pregón que este año corrió a cargo de
Pedro Mariscal quien destacó el “orgullo” que sentía al
haber sido elegido como el pregonero de esta edición.
Mariscal realizó un discurso que giró en torno a tres ejes:
La historia del santo, la labor de la Cofradía de la ermita
del Monte Hacho y su experiencia personal. Y es que tal y
como señala Mariscal la devoción por el santo se ha heredado
en su familia. Según manifiesta, su madre todos los martes
acude al templo, un camino que ha recorrido con Mariscal
desde que él era pequeño, “por eso me trae muchos recuerdos
familiares”, apunta.
Historia y hermandad
Además de aludir a sus vivencias personales, Mariscal abordó
la historia del santo y el trabajo de la Cofradía. En cuanto
al primer asunto el pregonero de este año puso el acento en
la devoción que hay entre los ceutíes por el luso “a pesar
de que nunca llegó a pisar Ceuta. Por eso se cree que la
tradición viene de los portugueses”, señala.
También destacó la labor que lleva a cabo la hermandad en la
ermita a lo largo de todo el año.
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