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El Tercio Duque de Alba 2º de la Legión conmemoró ayer en
García Aldave la concesión de la Cruz Laureada Colectiva de
la Real y Militar Orden de San Fernando a tres Banderas y a
una Compañía. Las gradas presentaron un colorido
inigualable, con asistencia de los más de 200 veteranos del
Sahara presentes este fin de semana en la ciudad.
Legionarios de honor que celebraban su V Convención;
miembros de la Casa de Ceuta en Cádiz y Amigos del Camino de
Santiago en Cádiz, también acudieron.
Exitosa mañana de Sábado Legionario en García Aldave. Este
acuartelamiento, que en la actualidad queda destinado para
prácticas de unidades u otras actividades tras la disolución
de la V Bandera, fue ayer el escenario de un acto que
presentó numeroso público en las gradas, algo inhabitual. Al
menos 700 personas acudieron a la cita: 220 eran antiguos
veteranos del Sáhara; medio centenar, legionarios de honor;
otros tantos, de la Casa de Ceuta en Cádiz y otro grupo
numeroso que se dejó ver menos, de la Asociación de Amigos
del Camino de Santiago en Cádiz. El resto de los asientos
fueron ocupados por familiares, militares, oficiales y
allegados a la Legión. Quien más y quien menos conocía el
himno del Novio de la Muerte, que se cantó con fervor.
Todos los Sábados Legionarios tienen un porqué y este no iba
a ser menos. Ayer se conmemoró -así obliga el Real Decreto-
la concesión de una Laureada Colectiva, otorgada a las
Banderas IV, V y XV y a la XVI Compañía -hoy, la 3ª de la IV
Bandera-.
El coronel jefe de la Legión, Alfonso Álvarez Gaumé leyó uno
de los párrafos que justifican la concesión de estos
méritos: tras una intensa batalla, de ataques y
contraataques nocturnos y después de haber causado bajas la
XVI Compañía, tales como la de su capitán, por la mañana,
los legionarios persistieron. “En las primeras horas de la
mañana, los pocos legionarios que quedaban de la compañía se
lanzaron de nuevo sobre la posición, consiguiendo, bajo un
intenso fuego enemigo, la ocupación de todos los objetivos
marcados, a cambio de sufrir el sesenta por ciento de bajas,
entre ellos, la de su capitán”, reza el relato.
Los veteranos del Sahara aprovecharon el acto para tirar de
memoria y recordar a sus compañeros legionarios en ciudades
como Aaiun o Mahbes. El Tercio concedió a Abraham García
Corrales y a su compañero Juan Olegario Piñeiro Regueiro la
oportunidad de colocar la corona de laureles para honrar a
los que dieron su vida por España sirviendo en la Legión.
También hubo entrega de obsequios. Silverio de la Yeza,
presidente de la Casa de Ceuta en Cádiz, entregó una placa
al coronel jefe de la Legión en agradecimiento por la
invitación. La misma gratitud mostraron los Veteranos del
Sahara, que hicieron entrega de otra placa, a través del
portavoz de la expedición, Antonio Rivas.
Durante el acto, se otorgaron distintas condecoraciones:
encomienda de San Hermenegildo, a Manuel Calleja y a
Crescenciano Morchón; Cruz San Hermenegildo, a Eduardo
Camacho y Federico Luis Díaz; distintivo blanco, a Guillermo
Corrales, Claudio Montero y Hussan Ahmed; constancia en el
servicio, a Álvaro Fernández y Francisco Javier Pelayo;
mención honorífica, a Féliz León, Francisco Javier Rojo,
Manuel Sánchez y Juan Antonio Zurita.
El comandante general, Enrique Vidal de Loño, presidió el
acto. También estuvo presente, el coronel jefe de la
Delegación de Defensa, Naveira.
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