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Eso lo sabe “todo” el mundo y lo
dice esta escribidora hablando ex cátedra, en plan Oráculo
de Delfos, cual adalid que anunciara la victoria en las
europeas del peperismo rampante en campo de gules. Me
respondan ¿A quien votarían, por ejemplo, los niños de
Carolina de Mónaco? Pues a Mayor Oreja que es muy señor y
que fue, en su momento, la gran esperanza blanca de la
derecha española ¿O no recuerdan los tiempos gloriosos en
los que los españoles hacíamos felices cábalas entre Rodrigo
Rato y Jaime Mayor Oreja para que, tras el lógico congreso
de donde surgiera el electo en las urnas, sucediera uno de
estos primeras espadas a Aznar?.
Lo que aconteció es que no hubo congreso y la Dedocracia, el
gran pecado capital de los cargos o carguillos del PP,
sustituyó a las urnas y Aznar optó por alguien “cómodo” como
Mariano Rajoy para señalarle con su bien manicurado dedo y
así poder seguir mangoneando el cotarro desde ese Excelso
Club de Pijos que es la FAES. ¡Fundación más refinada no
existe! Se vocalizan las siglas y su impacto en la atmósfera
atufa a Homme de Dior parfum. Resumiendo, Rodrigo Rato, el
gran economista, el carismático, el yogui alumno del maestro
orientalista Ramiro Calle, el intelectual puro en busca de
la iluminación, se fue al FMI, a ocupar un puestazo y Jaime
Mayor Oreja, carismático, templado, con dos cojones, fue
enviado a ese gran cementerio de elefantes que es el
Parlamento Europeo. Ambos quitados de en medio. Ambos
infinitamente más válidos que Aznar. Y no digamos que la
descendencia de Aznar y sus cargos emanados de la genuina
Dedocracia del jefe de turno. Secretaria María Dolores de
Cospedal ¿Y quien es esa? Pues una que, a Rajoy le parece
“muy moderna” y “muy puesta” para dar el anhelado toque
“progre”. ¡Joder con los complejos! Para mí que, los cargos
que aspiran como logro máximo de su ideología política a que
les vote la tribu Bardem y el artisteo subvencionado, mejor
harían en llamar a las puertas de Ferraz a ver si les
permitían afiliarse al menos con el rango de “Poyaque”. Es
decir “poyaque estás aquí, camarada, tráeme un Red Bull”
“poyaque me alargas el Red Bull llama a Elena Benarroch pa
que le apañe un modelazo a mi parienta, que viene la Carla
Bruni y quiere hacerse con ella la afoto” “poyaque has
encargáo el trapo a la Benarroch pasa la bayeta con el
cristasó por el despacho de mi Bibiana Aido, que los muebles
han costao sesenta mil euros y desde que los instalaron no
han limpiao por debajo de los sofales y está too lleno de
pelusas y aluego las visitas critican, porque la gente es
muy mala y hay mucha envidia en el mundo”. No me veo yo a
Rato, con sus asanas matutinas y sus magníficos
conocimientos económicos, aspirando a “poyaque”, ni al mejor
ministro del Interior que ha parido la democracia, Mayor
Oreja, perdiendo el culo por compadrear con los “modelnos”.
¡Que gran, que inmensa putada nos hizo Aznar!. Pero es lo
que hay. Por lo menos hasta el próximo congreso ¿Qué dicen?
¿Qué el peperismo siempre monta congresos “a la búlgara”? Es
verdad. Pero es lo que hay. Y como somos irremediablemente
guapos e irremediablemente encantadores y encima no somos de
izquierdas, tenemos que partirnos el culo, consolarnos con
que Mayor Oreja está directamente asesorado por Rodrigo Rato
y votar para mandarle a Bruselas, para que allí represente
al glamour patrio, se haga tronco de nuestro líder natural
que es Sarkozy y se traiga de vuelta para España, para las
próximas elecciones, unas cuantas lecciones de testiculina
del franchute.
¿Y ahora por que regruñen con expresión hosca con ademán de
estar redactando un comunicado de repulsa, rechazo y condena
hacia mi persona? ¿Qué silabean con esas lenguas bífidas de
aspides extremeños catalogados como especie protegida? ¿Qué
como se atreve una anarcofacha a poner en entredicho los
métodos y maneras de seres políticamente impecables como son
los dirigentes del PP nacional? En primer lugar no me llamen
anarcofacha, sino anarconeocon y en segundo lugar no pueden
evitar que pertenezca a ese inmenso núcleo de derechosos de
cuya teta y sufragio mama el peperismo, muy a su pesar,
porque me consta que preferiría ser votado por la progresía
más transgresora, ya saben, por la “modelnidá”.
Pero no se sulfuren conmigo, me han diagnosticado
desinhibición del lóbulo temporal y la patología conlleva
expresar sin tapujos ni cortapisas mis pensares y sentires,
vale, es mentira, pero los rifeños somos de esa leche y nos
acostumbran desde niños a decir la verdad, de hecho, como
compensación, les prometo que si alguno de ustedes se alarga
en agosto a la feria de Málaga les compraré en un puesto un
sombrero de “Pasión de Gavilanes”. Por cierto, me recuerden
que envíe a Mayor Oreja y a Rato el sombrero de “Pasión de
Gavilanes” para que sorprendan con tan genuino tocado a sus
amistades. ¿Qué dicen ahora? ¿Qué el sombrero es cuestión es
más hortera que un ataúd tuneado y que merece pertenecer al
imaginario del horror cañí junto a los souvenirs de cerámica
“Ceuta, sol de España en Africa” y los móviles con canciones
de El Fary? Vale, vale, me reconozco la excepción que
confirma la regla de que, la gente “guapa” vota al PP. Pero,
las minorías marginales en claro riesgo de exclusión social
somos muy codiciadas al momento de hacerse la foto en la
campaña, el resto del tiempo no tanto, soy consciente de
ello y no obstante reitero mi deseo de obsequiarles con un
sombrero de “Pasión de Gavilanes” siempre que voten
peperismo desde la perspectiva budista, por supuesto. Que es
la perspectiva del maestro de yoga cuando, tras años de
enseñanza, el alumno le pide que resuma su sabiduría y el
maestro cierra los puños y abre una mano “todo” y luego la
otra “cambia”. “Todo cambia”.
Pero esta es la realidad presente. Y la gente que es o se
siente guapa, vota PP.
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OPINIÓN / ESPAÑA CAÑÍ
