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A camino entre deporte, paseo y
viaje, el senderismo es una de las actividades de ocio que
más adeptos gana en estas fechas, por combinar el contacto
directo con la naturaleza y un ejercicio tan intenso como lo
desea quien lo practica
En principio, el senderismo no exige una preparación
excesiva ni un molesto o largo desplazamiento hasta el lugar
en el que practicarlo: un recorrido por montes y bosques
cercanos, o un fin de semana conociendo a pie parajes
naturales son suficientes para un primer contacto con este
deporte. De todas las edades y de todos los sexos han
participado en el acto organizado por la Asociación de
Mujeres Vecinales de Ceuta al que acudieron algo más de un
centenar de ceutíes. Senderismo en pura esencia para
festejar el Día Mundial del Medio Ambiente que la asociación
ha adelantado por ser el 5 de junio el día de su
celebración.
Pero ha sido una buena muestra para contemplar que Ceuta
dispone de unos parajes excepcionales para la práctica de
este sano deporte de limitado esfuerzo y válido para todos.
Y es que Ceuta goza de zonas de monte a ambos lados del
núcleo urbano, rodeadas de mar azul y aire puro que dotan de
carácter a la ciudad y posibilitan la práctica de numerosos
deportes y el disfrute de una naturaleza plenamente
integrada en la urbe.
La experiencia plasmada en evento organizado por la
asociación Mujeres Vecinales debe servir para el fomento de
esta actividad en una ciudad como la nuestra que se presta a
las mil maravillas a prácticas de esta categoría. Las
vistas, los parajes, y el contacto directo con la naturaleza
son valores propios que merecen ser muy tenidos en cuenta.
Actualmente hay caminos ya seleccionados dedicados a ello.
La ruta de los fuertes es un claro ejemplo. Pero aún hay más
posibilidades que deben ser, junto a ésta, desarrolladas
porque también con el senderismo se atrae turismo aunque el
fomento de esta actividad también sirve para el consumo
local.
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OPINIÓN / EDITORIAL
