Juan Antonio Cabrera seguirá en el Real Valladolid al menos
hasta junio de 2011, una vez que en el día de ayer el
futbolista ceutí rubricara el nuevo contrato con la entidad
albivioleta de cara a las dos próximas temporada. Un periodo
de tiempo que se podría ampliar automáticamente por otras
tres campañas, en el supuesto de que Cabrera disputara un
mínimo de partidos con el primer equipo durante el curso
2009/10 y el 2010/11. Lo que, en caso de cumplirse,
supondría que el espigado mediocentro estuviera en tierras
vallisoletanas hasta seis años. El que acaba de cumplir, los
dos que acaba de firmar y los tres que contemplan las
claúsulas.
Ya la campaña que acaba de terminar pudo renovar de forma
automática, si hubiera disputado 25 partidos con el filial,
que militó en el Grupo I de Segunda ‘B’. Cifra que no
alcanzó porque, cuando empezó a jugar fue a raíz de la
llegada al vestuario albivioleta de Onésimo, quedándose en
15 encuentros disputados. Una cifra que le sirvió para
convencer a los técnicos y para ser llamado por el
entrenador del primer equipo, José Luis Mendilibar, con
quien se ejercita hasta final de temporada. Una experiencia
que llena de satisfacción a este joven de 20 años recién
cumplidos, que el verano pasado se decidió a probar fortuna
en el filial vallisoletano, tras su paso por el Goyu-Ryu de
División de Honor. La lástima, que el segundo equipo
pucelano no logró la permanencia, descendiendo a Tercera,
donde Cabrera tendrá que jugar el curso próximo. Aunque ese
no es un tema que le preocupe, porque su principal objetivo
es acumular minutos.
En otro orden de cosas, Corrales sigue a prueba con el
Sevilla C, equipo del grupo X de Tercera, con el que la
próxima semana tiene previsto disputar varios partidos en
los que mostrar sus cualidades.
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