|
Con la entrega de la Medalla de la
Ciudad en su categoría de oro a la Policía Local se cierra
un ciclo de merecidos reconocimientos de los ceutíes hacia
las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad que operan diariamente en
Ceuta. Con casi 140 años de historia, la hoy Policía Local
ha sabido sobrellevar perfectamente el paso de los años
adaptándose a los tiempos y a cada momento para servir al
ceutí desde nada menos que el siglo XIX.
En los últimos tiempos la operatividad de la Policía Local y
su polivalencia dan muestras diarias de solvencia en el
quehacer cotidiano. La institución se sustenta en pilares
sólidos de cercanía al ceutí porque su labor ejecutiva nace
precisamente de la tierra con agentes mayoritariamente
caballas, lo que da un punto próximo interesante.
Desde ayer, con más razón aún, la Policía Local podrá seguir
caminando con la cabeza bien alta porque ayer alcanzó la
mayor distinción que otorga la Ciudad Autónoma. El trabajo
de la Policía Local ha tenido un reconocimiento especial y
extraordinario nacido precisamente de las bases ciudadanas.
Los vecinos de Ceuta a través de su representación
institucional fueron los que propusieron tal distinción. Un
hecho que no pasa desapercibido en el cuerpo local de la
Policía porque se trata pues de un agradecimiento sincero
que parte del alma de los ceutíes.
Junto a la Policía Nacional y la Guardia Civil, la Policía
Local conforma un triunvirato de éxito profesional constante
del que sale beneficiada Ceuta. La prestación de servicio,
la seguridad que se aporta es excepcionalmente bien recibida
por el ciudadano de bien que sabe valorar el trabajo, el
esfuerzo y la dedicación de quienes hacen derroche diario
para tranquilidad del ceutí.
Ahí están siempre, para lo que se les llame. Los tres
cuerpos de seguridad pueden mostrar orgullosos el
reconocimiento de una ciudadanía agradecida por el arrojo e
importante labor que desempeñan en favor de la ciudad.
|
OPINIÓN / EDITORIAL
