Decía un poeta del carnaval
gaditano, que para escribir a otra comparsa o chirigota,
fuera de la tacita, que “no tenia tiempo”, más que nada bien
podría esgrimir dos razones, una que lo “bueno” se lo
guardaría para su agrupación, y dos que tan buena amistad y
ambiente, que pudiera tener con los de fuera, se podría
perder “ por abrir los ojos a los dormidos”, digo esto más
quenada, por cuantos hayan querido “mangonearme” con di esto
y pon lo otro, en algún artículo, por aquello de que yo
tengo un estilo y una personalidad, y viendo muchas veces
las contestaciones y cortes que me dan, a la edad que tengo,
pues ajo y agua… y que todo el que se precie que coja un
folio y un lápiz, y vayan estrujándose la cabeza. Muchos han
sido los que me paran por la sangría del blog referente al
Barcelona, dieciocho años escribiéndo y la culpa la tengo yo
del Barcelona… .
Entre medias al salir de currar, me apetece una cervecita,
los bares aledaños y antes de desplazarme, me suena el
móvil, de repente a mi alrededor parecía que estaba en una
manzana de Manhattan, una sensación de ahogo me envolvió, y
eso que eran las nueve de la noche, el tráfico, el ruido y
el humo me envolvieron como una alfombra persa, no podía ni
contestar la llamada, me apetecía cada vez más una cervecita
bien fría para refrescar el gaznate en estos rincones
caballas, con un buen ambiente y una buena tertulia, ruidos
por doquier que demostramos porque somos los más
escandalosos de Europa.
Las conversaciones me encantan si cada uno va marcando el
ritmo y no se pisa el uno al otro, más que nada porque
últimamente me cortan las conversaciones, a pleno saco y
fastidia por cuando mejor estoy en el arte de la charla y la
narrativa, serán falta de tacto y educación para encontrar
bien la horma de su zapato o un buen bofetón bien pegado en
la cara. En esas oratorias que disfrutamos en los descansos
del futbol, en los postres de comuniones, hablamos de temas
futbolísticos, y esos tufillos para dar recados a algún
mentecato, que si el Madrid feneció con Franco, que tendrá
que ver una cosa con la otra, complejo mal dado de tiempos
pasados, si bien el Ath.de Bilbao y el Barcelona se hartaron
de Copas, el Real Madrid se paseaba por Europa, donde el
Generalísimo no podía poner los pies… a esos que ni ganando
todos los títulos, están saciados, un buen bofetón con la
mano abierta, lo malo es que se meta alguien a fuego
cruzado… Que tendrá que ver el antojo de la jaula por estas
narraciones, a situaciones esperpénticas, de personajes que
se creen el ombligo del mundo y que no ven más de su nariz,
sobre todo en los temas deportivos bien porque en mis veinte
años de atletismo, fitness, pesas y musculación, ni estuve
para ser campeón de Europa, ni me he dejado la panza y reir
las gracias a otros en las barras de los bares, que verdad
eso de caer en gracia y no ser gracioso.
La jaula estaba en una covacha, esos cuartos trasteros donde
se tira y guarda todo, en el ámbito familiar también tenia
llave para coger la jaula comia de mierda, lavarla y hacer
de transporte para un pájaro de un sitio a otro, fulano me
la devolvería, aquello fue mi perdición, el enterarse el
propetario de la jaula, que cuando se la iba a devolver, con
síntomas de síndrome de Diógenes, todos los días me llamaba
por la jaula, cuando se la devolví, otra vez a la covacha,
cacharros y cosas encima de ella, para el fin de los
tiempos, antojos tiene la causa.
Para terminar y tantas noticas y cosas que me entero de
palizas, agresiones, y maltratadores, como el que mata a su
mujer e hiere a un motorista que se interpuso en el crimen.
Este va para Bilal joven chico que eres un aprendiz de
maltratador, por pegarle a una niña que salía de fiesta de
una comunión, Bilal la sociedad te marcará y la sociedad te
buscará las cosquillas dentro y fuera del colegio.
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