Se presentaba el duelo dialéctico
entre J. L. Rodríguez Zapatero y Mariano Rajoy como si de un
“Duelo de Titanes” se tratara (emulando la famosa película
de John Sturges con Burt Lancaster y Kirk Douglas como
protagonistas), quedando todo ello en un importante combate
de fondo, en el que los dos contendientes fueron verdaderos
exponentes del arte de pegar, fintar, amagar o, lo que es lo
mismo, argumentar, dialogar y discutir sobre las cuestiones
que eran, según nos parece, base del enfrentamiento: la
situación económica, política y social de la España que nos
acoge y que nosotros, como prometimos hace unos días,
tratamos de reseñar en clave boxística.
Este combate cara a cara, que viene determinado dada la
costumbre instaurada por el púgil de la calle Ferraz Felipe
González en 1983, (pasando por alto el de la anterior
temporada pugilística de 2008 ya que en los años que se
celebran Elecciones Generales no se llevan a cabo veladas de
esta clase) supone, junto con el de los Presupuestos
Generales del Estado, el primer intercambio de pareceres
iniciándose con la exposición de un catálogo de soluciones
que ofrece quien detenta el título de Presidente y que, dado
el prolongado espacio que necesitaríamos aunque sea para
hacer una escueta reseña, lo vamos a exponer en dos asaltos
o fases.
Y así vemos, en esta primera fase, un previo lucimiento del
Presidente con la exposición de un conjunto de recursos
puestos a disposición del ciudadano (que esperamos no
resulten ser el cuento de La Lechera) propuestas
difícilmente igualables por su opositor ante quien no se
puede “bajar la guardia” y a quien a la vez reconoció “la
equivocación de sus previsiones” sabiendo que tiene ante si
a un púgil vigilante “por la grave crisis generada a causa
de la expansión incontrolada del Sector Inmobiliario y la
consecuente especulación del ramo, ocasionadora de la peor
tormenta financiera y económica provocadora del aumento
brusco del desempleo”. Tras esta finta, sigue con su defensa
del gran esfuerzo en Educación y en Investigación e
Innovación, promoción de Energías Renovables, lográndose
reducir en cinco puntos la tasa de temporalidad laboral.
Decisión de luchar contra los efectos mas negativos de la
expansión incontrolada del sector inmobiliario, fomento de
alquiler de viviendas. Causa del brusco estadillo de la
burbuja inmobiliaria fue también el brusco aumento del paro.
Todo ello, yendo directamente al plexo solar y mentón de su
adversario. El detentador (con toda legalidad) del título,
continúa su ataque con el Plan Integral contra la Crisis,
Medidas del Plan E (el mayor volumen de recursos económicos
puestos a disposición de los Ayuntamientos por cualquier
gobierno anterior), el aplazamiento fiscal para los
contribuyentes de rentas mas bajas, medidas financieras del
ICO puestas a disposición de empresas y familias, reducción
de cinco puntos en el Impuesto de Sociedades para pequeñas
empresas, recorte de 2.500 millones de euros en el
presupuesto estatal y otras acciones sociales, que hacen
mella en el adversario que dobla el gesto sin que la sarta
de golpes le haga hincar la rodilla en tierra (ayudas
económicas para titulados universitarios de 25 a 40 años,
incentivos fiscales para la contratación de viviendas en
alquiler, atenciones para personas dependientes así como
ayudas al sector del automóvil y a los compradores de los
mismos y otras acciones referidas a la nueva etapa del Pacto
de Toledo). Siguiendo con otra serie de directos al mentón
como la futura conferencia de presidentes autonómicos,
diálogo sobre atención a desempleados, en definitiva,
atenciones para la lucha contra la crisis y el desempleo que
vienen a ser las causas principales de estos
enfrentamientos.
Nos cabe resultar, por último, quizás causa de empeño del
Presidente en reforzar sus propuestas, el “dribling”
involuntario, que rectificó a tiempo, de 500 millones de
euros cuando en realidad se refería a 500 euros de
bonificación para la compra por los ciudadanos de vehículos
nuevos. Y suena el gong (campana) que nos indica que termina
esta primera fase del combate estelar entre Zapatero VS
Rajoy por lo que aprovechamos el descanso para preparar la
reseña de la segunda que trataremos de llevar a nuestros
lectores en próxima edición.
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