El profesor Sosa Wagner habló
“claro-clarito”, como diría el bueno de Mefistófeles.
¿Todavía no han entrado en el blog de este caballa de pro…?
Pues no dejen de hacerlo, podrán enterarse sin chantajes
mediáticos de por donde sopla el viento en la ciudad
querida. Digo. Pues sí, dejando alto el pabellón de UPyD el
candidato a las elecciones europeas por el partido de Rosa
Díez (que en Ceuta lidera el doctor Julián M. Domínguez)
puso el grito en el cielo tras visitar El Tarajal y la
barriada del Príncipe Alfonso. En declaraciones ayer a El
Pueblo, recogidas por G. Testa, el profesor Sosa Wagner
considera “increíble” la situación de ambos puntos,
“increíble (son sus palabras a las que muchos nos sumamos)
porque con la cantidad de fondos europeos que han llegado
aquí no se haya conseguido acabar ya con la imagen
tercermundista del paso fronterizo y con las carencias de
esta barriada”. Digo y subrayo: el problema nunca ha sido de
falta de pasta, sino de voluntad política.
Es curioso por otro lado que, frente al histórico abandono
del PSOE fue el PP, con mi estimado Juan Vivas al frente de
Ceuta, quien empezó a impulsar el saneamiento integral de El
Príncipe… y quien, lo que son las cosas, va camino por el
contrario de perder su influencia en dicha barriada; atisbos
de ello ya se vieron -fui testigo como apoderado de UPyD en
la mesa correspondiente- en las últimas elecciones, dándose
un paso más al frente con la defenestración de Larbi como
histórico presidente de la asociación de vecinos… Anda que
no disfrutó la ascensión del nuevo dirigente vecinal elegido
por amplia mayoría, Abdelkamal, la diputada socialista
Inmaculada Rodríguez que subió como un cohete a felicitarle,
paseando sonriente por el barrio hasta altas horas de la
noche; supongo que luego cotillearía lo observado con su
esposo, profundo conocedor de los avatares del entramado
islámico en la ciudad y de su peculiar dinámica psicológica.
Si, los fondos, el “flus”… El dinero es el nervio de la
guerra, advertía un genial artillero corso que llegó a
emperador. ¡Ah jai, chof!. Seguro que piensas lo mismo. Por
ello, en la “guerra” particular de la radical y
fundamentalista secta del Tabligh que diriges, has intentado
desviar los nada desdeñables fondos que el incauto Estado
español ha ido poniendo en tus manos: recuerde el lector
algunas de estas columnas así como la excelente
documentación aportada por el director de El Pueblo, Antonio
Gómez, sobre la asociación Al Ghufran, bajo control de
UCIDCE (Unión de Comunidades Islámicas de Ceuta, federada a
la entidad nacional UCIDE presidida por un tapado de
Vanguardia Islámica, el hermanito Tatary): un montón de
facturas falsas que supuso al hermanito Laarbi Maateis un
enfriamiento en su relaciones con los “paganinis” de la
Fundación Pluralismo y Convivencia… Y ahora, ¡ah jai chof!,
¿qué problemas tienes con la Ciudad Autónoma de Ceuta…?.
Porque, ¿saben?, las cuentas chirrían. Laarbi Maateis y su
banda recibieron el año pasado subvenciones por 36.000
euros… ¡que no pueden justificar!: ¿a dónde viajaste Laarbi,
con quién y para qué…?; ¿dónde y con quien comías y cenabas,
Maateis?; ¿qué coño conspirabas?. ¡Ah jai, chof!: vas a
tener problemas, puedo prometerte y prometo, para que la
Ciudad Autónoma de Ceuta se atreva, dado lo delicado de la
situación, a subvencionarte este año con 40.000 euros del
ala… Concluyamos con música y letra de Raphael: “¡Escándalo,
esto es un escándalo!”.
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