Entre los ceutíes ha corrido la voz de que cuando la UME se
marcha de Ceuta después de una visita pactada siempre sucede
algún acontecimiento medioambiental en los días sucesivos;
el último ejemplo fueron las inundaciones de septiembre del
año pasado. Pero esta voz supersticiosa se aleja de la
realidad. El único objetivo de la Unidad Militar de
Emergencia (UME) es el de ayudar a solventar cualquier
episodio incontrolado en la ciudad autónoma y en el resto de
España. La gente también lo saben y se han instituido como
un frente de batalla ante las adversidades de la naturaleza.
El Batallón de Intervención de Emergencia II (BIEM II) está
radicado en Morón de la Frontera y es el que actuaría en
Ceuta en caso de algún desajuste medioambiental y el que ha
realizado estos últimos días los ejercicios de tipo ALFA
dentro de su plan de instrucción para 2009. Pues bien, el
jefe del BIEM II nació en Ceuta y vivió en la plaza del
Teniente Ruiz. Se llama Juan Ramón Rodríguez Claudio y ha
sido el organizador de la trama de ejercicios completados
por sus hombres en la ciudad, ya que algunos de ellos
también han participado en las II Jornadas en Riesgos
Tecnológicos desarrolladas en el hotel Tryp. “Las hicimos el
año pasado en Andalucía y la Consejería de Sanidad de Ceuta
nos preguntó si podríamos hacerlas este año aquí”, comenta
Claudio.
La UME nació en 2006. Los incendios de Galicia y Guadalajara
fueron el detonante para que el Estado decidiera implantar
este cuerpo en España. “Nosotros actuamos siempre que nos lo
pide una comunidad autónoma, Ceuta o Melilla”, dicen siempre
los oficiales a los que se les pregunta. Precisamente, a
este ceutí le tocó mandar a los hombres desplazados por la
UME en el río Guadalquívir a consecuencia del rescate de
Marta del Castillo. Para Claudio este suceso ha sido el más
importante desde el punto de vista moral y sentimental. “Los
militares tenemos misiones y no conseguir rescatar a Marta
supuso un golpe para nosotros”, asegura, a pesar de que el
asesino confeso de la joven cambió luego la narración de los
hechos.
Los militares que conforman la UME pertenecen a todas las
ramas de las Fuerzas Armadas (Tierra, Mar y Aire) y dentro
del Ejército de Tierra a todas las armas. Es posible ver
desde un teniente de navío (equivalente a capitán en otros
Ejércitos) a un general de Infantería. Aquellos militares
que pasan a la UME tienen que superar un curso de cinco
semanas impartido en Figueras (Cataluña). Además, esta
Unidad de Emergencia contiente especialistas, desde buzos,
escaladores verticales y sanitarios a esquiadores para
temporales en la alta montaña.
Los del BIEM II forman cada día a las 8.00 horas y
posteriormente cumplen con los requisitos físico militares
contemplados en la Instrucción. Cada dos semanas
aproximadamente y teniendo en cuenta la época del año se
desplazan al campo o a otras ciudades para desarrollar
simulacros en incendios forestales o inundaciones y
temporales. “Lo primero es la vida de las personas y sus
bienes”, dice Claudio.
A pesar de que el BIEM II sea el que por organización
corresponde a Ceuta, el teniente coronel jefe recuerda que
es el Cuartel General de Madrid quien da las órdenes y quien
decide qué unidades van a qué misiones. “La UME somos todos
y es probable ver en en un área de competencia nuestra a
militares de otras demarcaciones, eso nos pasó en Tenerife
en 2007”. Ustedes se preguntarán, en caso de emergencia,
¿cómo se desplaza la UME a Ceuta? El dispositivo se activa y
las salidas del cuartel de Sevilla son escalonadas. En los
primeros 15 minutos sale el equipo de reconocimiento,
formado por un oficial y un equipo de comunicaciones; a la
hora tendrá que haberlo hecho el primer elemento de
intervención, formado por un pelotón, tres camiones
autobombas y un camión nodriza, y así, sucesivamente hasta
un tiempo máximo de seis horas. El desplazamiento del equipo
de Morón de la Frontera hasta Ceuta es de dos horas y media
por carretera y una hora en el ferry. Entre Valencia y
Madrid se reparten las aeronaves adecuadas para extinguir
incendios.
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