La UA Ceutí se ha convertido este año, a pesar de que falta
una jornada para que finalice la temporada, en la mejor de
las últimas cinco campañas. Después de que Juanma López se
hiciese cargo del equipo el 2 de enero del 2004, el
combinado unionista experimentó un cambio notable que se ha
reflejado durante los últimos años que ha militado en el
grupo VIII de la Primera Nacional A.
En aquella primera temporada, el técnico caballa se sentó en
el banquillo cuando su equipo ocupaba una discreta octava
plaza, consiguiendo finalmente elevarlo hasta un tercer
puesto que le dio opción de militar durante la 05/06 en
División de Plata. Sin embargo, la plaza se rechazo. Estaba
colocada la primera piedra de un proyecto ambicioso con el
que se pretendía que Ceuta estuviese representada, de nuevo,
en la élite del fútbol-sala nacional.
Durante la siguiente temporada el equipo demostró estar a la
altura de las circunstancias, y aunque no terminó como líder
del grupo (el Torremolinos, con cinco puntos más), la Liga
Nacional de Fútbol-Sala volvió a ofrecerle una plaza en
‘Plata’ al Ceutí. Durante la temporada, que contó con 28
jornadas, el combinado unionista obtuvo la nada despreciable
cifra de 161 goles, de los cuales más de la mitad fueron
conseguidos por el ‘tridente’ formado por Salvi (32 goles),
Abdel (31 goles) y Jesús (26 goles). Sin embargo, al igual
que había sucedido la anterior campaña, el club decidió
esperar, al menos, un año más para luchar por el ascenso de
categoría.
En la 2006/2007, más de lo mismo. Desde el arranque de la
temporada el Ceutí demostró que era uno de los claros
favoritos para optar por una primera plaza que estuvo
ocupando durante buena parte de la primera vuelva. A pesar
de ello, un Virgili de Cádiz más regular y varios
‘pinchazos’ ante rivales a priori asequibles terminaron
relegando una vez más al combinado unionista a la segunda
plaza. Durante aquella campaña Salvi dio un gran salto de
calidad que le permitió marcar 45 de los 156 tantos que hizo
su equipo. Los otros goleadores fueron Abdel (con 25
tantos), Jesús y Javi Tirado (con 17 goles cada uno).
Por tercera temporada consecutiva el club se encontraba en
la disyuntiva de aceptar o no la plaza que una vez más desde
la LNFS se le había ofrecido al Ceutí. En esta ocasión la
posibilidad se estuvo barajando más a fonfo, pero finalmente
la necesidad de firmar a varios jugadores profesionales y el
pago del llamado ‘valor plaza’ (hoy desaparecido), hizo que
de nuevo los directivos del Ceutí rechazasen la proposición.
La pasada campaña, sin embargo, fue más atípica. A
diferencia de lo que el equipo había estado buscado durante
las últimas temporadas, el objetivo del Ceutí fue el de la
formación de jugadores de cara a un posible ascenso a corto
plazo. Durante ese año de transición, el Universidad de
Málaga fue quien obtuvo el ascenso (terminando la temporada
con 13 puntos más que el segundo clasificado, el Antequera),
mientras que el combinado unionista finalizó en el sexto
puesto.
Pasado el año de transición, el Ceutí planteó esta temporada
con el objetivo de buscar una vez más el ascenso a División
de Plata. De esta forma, André, Yerry, Perita, Sufian e
Ismael se incorporaron a una plantilla dividida entre la
experiencia de algunos y la novedad de otros.
A pesar de ello, tanto unos como otros demostraron desde el
primer encuentro de la temporada que estaban dispuestos a
luchar por el ascenso. De esta forma, y a pesar de que falta
una jornada por disputarse, el Ceutí ha mejorado, con
creces, cualquier clasificación de las cuatro últimas
campañas, pudiendo incrementar en hasta nueve los puntos
finales obtenidos. Unos números que deja de nuevo a la
directiva la decisión de ascender a División de Plata y
regresar a la élite del fútbol-sala nacional.
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