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La portavoz del Ejecutivo ceutí, Yolanda Bel, y su homóloga
del Grupo Parlamentario Socialista, Inmaculada Ramírez,
volvieron a chocar ayer en sus planteamientos políticos, en
este caso a cuenta de las críticas de la segunda a cómo
pretende llevar la Ciudad Autónoma el proyecto del futuro
campus universitario que pretende habilitar en el antiguo
acuartelamiento del Teniente Ruiz con un coste de más de
treinta millones que se pagarán entre 2012 y 2015, una vez
esté terminado.
Ramírez reiteró ayer a este periódico, después de tocar el
asunto en el Diario Sur, que ella misma y su partido se
congratulan de la puesta en marcha de un proyecto que
promovió en los años noventa el socialista Francisco Herrera
“y del que el PP se mofó y paralizó cuando llegó al Gobierno
de la nación”.
“Nosotros creíamos en un campus para revitalizar la ciudad
con un proyecto a corto, medio y larzo plazo”, abundó
Ramírez. “Lo primero era consolidar la oferta universitaria
con la integración en la UGR de la Escuela de Enfermería que
no se logró hasta el año pasado; después, diseñar una
ampliación de la oferta educativa con carreras que no
hubiera en el distrito y ligadas a nuestro entorno para,
después, y en base a eso, desarrollar la infraestructura”,
explicó la portavoz socialista, a quien le parece que la
Ciudad “ha empezado la casa por el tejado”.
En la rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno de
ayer Bel lamentó que Ramírez mezcle “dos cosas que no tienen
mucho que ver” y dejó caer a la socialista que bien podría
influir sobre el Ejecutivo central para que la Ciudad no
tenga que cargar en solitario con el coste de la obra.
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desacuerdo
