Este es un mes de mayo calificado
de trascendente y decisivo para Ceuta desde el punto de
vista de la gestión en función de los objetivos que se ha
marcado el Ejecutivo local amen de las expectativas que se
suscitan en torno al conocimiento definitivo de cómo
quedarán los fondos para Ceuta en el contexto de la nueva
financiación autonómica que plantea el gobierno de José Luis
Rodríguez Zapatero y de la que el gobierno ceutí espera las
mejores de las respuestas en el ámbito de la responsabilidad
y de la lealtad institucional con un territorio sometido a
no pocas complicaciones derivadas de su ubicación, densidad
poblacional y pequeña superficie entre otras circunstancias
de un no menor calado.
Legítimas aspiraciones de los ceutíes a la hora de ser
considerados de veras para la recepción de una justa
compensación a los déficits con los que cuenta la ciudad en
relación a su responsabilidad autonómica y que le impide
fundamentalmente procurar unos niveles de vida convergentes
con el resto de los ciudadanos del país.
Pero este es un mes que traerá más sorpresas, como el
arranque de nuevo de la Comisión para la Reforma del
Estatuto de Autonomía, en lo que será una puesta a punto de
motor autonomista con el que discurrir por el renovado
camino del consenso e, incluso, de la unanimidad.
Un mes, este de mayo, en que se licitará las obras de la
guardería ‘Mediterráneo’ y en el que se sentarán las bases
para la construcción de otra con la misma capacidad. Un
hecho que podrá cumplir el objetivo de, efectivamente,
doblar las plazas de guarderías públicas en Ceuta en este
2009.
Las previsiones del Gobierno de, también en este mes de
mayo, sacar a licitación el nuevo Centro Asesor de la Mujer,
la rehabilitación del parque de San Amaro y la plaza de
Serrano Orive, servirá para sumar una labor de importante
inversión pública que se unirá a las reformas integrales de
barriadas como la de Erquicia o la de Juan Carlos I que se
ejecutan al tiempo que concluye, en estos treinta días la
reforma de la Avenida de África. Un no parar al objeto de
dejar las cosas bien preparadas antes del siempre caluroso
verano.
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