Parece ser que el caso ‘Rosello’, en el que fallecieron una
mujer y su bebé en el hospital del INGESA el pasado mes de
noviembre, va sobre ruedas.
Durante este mes de mayo el magistrado del Juzgado de
Instrucción número 3, que lleva la causa, tomará declaración
a los matrones que el día 12, cuando ocurrieron los hechos,
estaban de servicio. “A la mujer le atendieron en urgencias,
y el médico la subió a la planta de ginecología pero uno de
los matrones no la admitió y la envió de nuevo a urgencias.
Entonces tenemos que aclarar quien fue”, informó el letrado
de la acusación particular.
Junto a estos especialistas también declararán un ginecólogo
polaco, ya que se ha localizado al intérprete necesario que
hace una semana no pudo intervenir, y una ginecóloga que
también participó en el caso junto a este. Ambos en calidad
de imputados por una presunta negligencia médica.
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