Aantonio García Gaona puede decir misa. Se le puede llenar
la boca contando que las cosas están cambiando en la
Federación de Fútbol de Ceuta, que el ente federativo es de
todos los clubes, que se está modernizando el balompié
caballa. Ya. Será de cara a la galería.
En la edición de ayer de El Pueblo de Ceuta se decía que al
jugador del Hilal Deportivo que provocó la suspensión del
encuentro ante el Murallas, le había caído un único partido
de sanción. Para tirarse de los pelos... de ser cierto.
Porque han sido 19. Al que nosotros nos referíamos, por
haber sido expulsado por doble amarilla, otros ocho por
insultar y agredir a un contrario, más diez por una conducta
contraria al buen orden deportivo, provocando con ello la
suspensión del encuentro.
Entonces, ¿por qué en este medio se dijo que había sido un
único partido? Les explico. Resulta que desde las seis de la
tarde hasta las ocho y media, en la sede de la FFCE no hubo
nadie que se dignara a coger el teléfono, salvo una señorita
con aire altivo que levantó el auricular la media docena de
veces que el que suscribe marcó el 956 51 14 11. Y ella, por
mucho que se le insistió, ni siquiera se dignó a preguntar,
o a leer un acta del Comité de Competición que tenía en sus
manos. Tan sólo se limitó a decir: ‘Se lo hemos enviado por
correo electrónico’, y porteriormente que ‘se lo hemos
enviado por fax’. Que su trabajo es coger el teléfono.
En el correo electrónico, ni rastro. En el fáx, únicamente
llegó la primera hoja, en la que decía que a Mohassen
Mohamed le había caído un partido. Moraleja. Que la
Federación es un desastre. Es decir, que las cosas siguen
igual. Mientras otros siguen teniendo hilo directo. La
semana que viene les contaré algo más.
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