La magistrada del Juzgado de lo Penal número 1 ha dictado
sentencia contra dos sujetos al responder por un delito
contra la salud pública, con las penas de tres años de
prisión y multas para cada uno de ellos.
Los hechos denunciados se produjeron el 15 de enero, sobre
las siete de la mañana, en la zona de preembarque de
vehículos de la Estación Marítima cuando varios agentes de
la policía localizaron cuatro kilos de hachís en la batería
del coche de uno de los acusados. Dicho imputado declaró en
el juicio, hace dos semanas, que desconocía la existencia de
la droga y que su vehículo había estado en manos de un
limpiacoches de Castillejos mientras que él se encontraba en
su tienda de comestibles, justo el día antes de su
detención. Dicho empleado, quién acudió voluntariamente a
testificar, reconoció haber introducido la droga en el coche
de su cliente. “Cuando se produjo la detención vinieron a
buscarme el hermano y la mujer del cliente y me contaron lo
ocurrido. Y como me arrepiento, vine a declarar”, explicó el
acusado, en su defensa, en el acto del juicio. Varios
agentes de la policía acudieron como testigos a la vista
oral hace unos días y contradijeron la versión de uno de los
acusados, el conductor del coche y cliente del empleado de
Castillejos. “Cuando detuvimos el coche el perro ladró y
encontramos la droga en la batería. El vehículo desprendía
mucha agua, como si lo hubieran lavado 15 minutos antes”,
argumentaron en su momento. La defensa del cliente recurrirá
la sentencia.
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