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La Hermandad de Nuestra Señora del Rocío celebró con éxito
en la tarde de ayer un desfile de moda flamenca en el
restaurante Varadero, al que asistieron 340 personas. El
motivo del acto era recaudar fondos para sufragar los gastos
que conllevarán los arreglos de varios instrumentos de la
Hermandad ante la inminente conmemoración de los 25 años de
historia.
Se agotaron las entradas. Una taquillera se afanaba pasadas
las 17.30 horas en explicar que el aforo estaba completo. Se
habían agotado las localidades. Dentro, los empleados del
catering contratado repartían una suculenta merienda a los
asistentes, con dulces, zumo y leche.
El público cogía sitio y faltaban sillas y espacio para
sentar a todo el respetable. 15 minutos antes de que diera
comienzo el desfile, los corrillos y los nervios
desbarataban el silencio de las modelos que poco después
lucirían los trajes de flamenco sobre la pasarela.
A las 18.00 horas comenzaba la función. En primer lugar, las
más pequeñas, de entre 3 y 14 años. El salero y el arte
natural desfilaban sobre el escenario y provocaban la risa
de un público entregado con los futuros ejemplares del arte
caballa. Eran las niñas de la Escuela de Danza de María José
Lesmes. El organizador del evento, Eduardo Ayala, miembro de
la Hermandad, quería agradecer públicamente tras el acto la
buena disposición de la Escuela. “Lo han hecho de manera
altruísta y han desfilado como si fueran profesionales”,
comentó. Los trajes pertenecían a la Boutique de Carmen
Astorga y tras el desfile quedarán disponibles para que
quiera pueda lucirlos en las ferias que ya sobrecogen a
Andalucía.
Un total de 20 niñas y 1 niño (el único varón de la gala,
vestido con traje corto) completaron la primera fase del
desfile. A continuación, salieron a escena las mayores. La
risa se aplacó para dar lugar a la serenidad. La madurez
trajo consigo la mirada contemplativa por parte del
espectador y el lucimiento y el desparpajo de las modelos.
Por último, una joven con traje de novia rociero puso la
guinda a una tarde que empezó con una merienda y terminó por
una cena visual de buen gusto.
Durante el descanso, miembros de la Tertulia Flamenca,
invitada de honor a la gala, interpretaron una copla primero
y una pieza flamenca acompañada de fandangos onubenses en
segundo lugar, con Pepe Escobedo al cante y Pepe Benítez a
la guitarra. Otro manjar más. Durante el descanso también se
sortearon regalos por parte de las 12 empresas locales
patrocinadoras. Joyería Carrillo, Joyería Blanco, Contreras,
Losantos, La Guita, La Meca, Benneton, Constantino Álvarez,
Banino, Super Roma y Difesa.
El coro del Rocío, por su parte, compuesto por 22 personas,
animó con las guitarras las coreografías que se produjeron
durante el desfile. En primer lugar, 10 mayores, que
bailaron una sevillana. Posteriormente, otras 10 hicieron lo
propio. A continuación, la que iba vestida de novia bailó
una coreografía individual. Por último, todas las mayores
juntas volvieron a interpretar una coreografía, una rumba.
En cuanto a la presentación del acto, recayó en la persona
de Juan Jiménez Asensio, vocal de la Hermandad, ya que Olga
Martí tuvo que ausentarse a causa de estar enferma.
Con el dinero recaudado se remodelarán las carrozas de la
Hermandad y unos Sin Pecados. Ayala recordó también que el
ganador del sorteo que se celebró el viernes entre 1.000
participantes ya pueda recoger su premio, un traje de la
Boutique de Carmen Astorga. El número agraciado fue el 549.
El próximo acto que celebrará la Hermandad será el 17 de
mayo, cuando procesionen a la Virgen del Rocío desde Santa
Teresa en Rosario de la Aurora (7.00 horas)
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