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Uno de los objetivos primordiales que se fijó la mesa
permanente del Consejo de Hermandades y Cofradías de Ceuta
fue el intentar realizar diversas acciones sociales para
mejorar en la medida de lo posible a las personas más
necesitadas. Estas acciones sociales están enfocadas en dos
frentes, uno a nivel local y el otro enfocado a los países
del tercer mundo. Precisamente ayer, desde la mesa
permanente del Consejo de ha dado a conocer las primeras
ayudas al tercer mundo.
El presidente del Consejo de Hermandades y Cofradías de
Ceuta, Juan Carlos Aznar Méndez, acompañado por el resto de
miembros de la mesa permanente, destacó que después de mucho
estudiar los microproyectos que bimensualmente presentan en
su revista las misioneras de Nuestra Señora de África, han
determinado aportar su granito de arena a dos de estos
microproyectos.
A este respecto, desde el Consejo de Hermandades y Cofradías
de Ceuta se ha destacado que atendiendo el Reglamento Base
Diocesano y la acción caritativa encaminada al Tercer Mundo
como signo de solidaridad con los pueblos más pobres de la
tierra que señala el artículo 95, párrafo 2 dle precitado
texto lega donde se destinará el 0,7% de los ingresos netos
a esas ayudas, se ha decidido sufragar dos miniproyectos de
las misioneras de Nuestra Señora de África que realizan su
labor en el continente africano.
El primero de estos microproyectos está encaminado a que
Honorine Kassoube, mayor de ocho hermanos y que ayuda a su
madre a sacar adelante a esa “tropa”, pueda poner un puesto
en el mercado de Bobo-Yulaso con artículos de menaje e
higiene, precisamente para que pueda hacer realidad ese
sueño, el cual está avalado por Antonio Molina, responsable
del citado microproyecto, el Consejo abonará un total de 500
euros.
Por otra parte, el segundo de los microproyectos está
presentado por la hermana Blandine María, la cual interviene
por un joven de 25 años de nombre Romaric Dakuo, huérfano
desde los ocho años, asalariado de un ganadero cuatro meses
al año. Para que el resto de los ocho meses quiere cultivar
unas tierras y para ello necesita cavar un pozo y colocar
una alambrada para el ganado. Para que pueda llevar a cabo
este microproyecto, el Consejo de Hermandades también
realizará una aportación de 500 euros, siendo el responsable
del mismo Manuel Gallego.
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