Cuando Carlos Orúe relevó a Benigno Sánchez al frente del
vestuario de la AD Ceuta, en los planes del técnico jerezano
estaba el continuar en el banquillo de la entidad caballa la
próxima temporada. Un pensamiento que el gaditano mantiene
un mes después de regresar a la entidad ceutí, a pesar de no
haber logrado el objetivo que le había encomendado la
directiva de clasificar al equipo para volver a disputar la
fase de ascenso a Segunda División ‘A’. Eso sí, preguntado
por su futuro, Orúe responde que “ni me preocupa”,
argumentando que “he venido a echar estos dos meses, que
hubiera preferido que fueran tres”, en caso de clasificar al
equipo entre los cuatro primeros. Espetando que, a día de
hoy, “me preocupan los tres puntos del domingo” ante el
Racing Portuense. Confesando que “por supuesto que me
gustaría”, para poder consumar el ascenso de categoría desde
la banda. No desde los despachos, ya que el puesto de
secretario técnico no le seduce lo más mínimo, “ni aquí ni
en ningún sitio”. Relatando que “el entrenador depende de
veinte o veinticinco personas, mientras que el secretario
técnico depende del entrenador y de los jugadores”. Una
decisión que queda en manos de la directiva.
Lo que está en manos de Carlos Orúe y sus jugadores es
lograr el triunfo ante el Racing Portuense en el Alfonso
Murube, donde esperan dar una alegría a la afición. Aunque
“primero por nosotros, que lo estamos deseando y después por
ellos”. Advirtiendo que “muchos de los que estamos ahí
dentro renunciaríamos a muchas cosas, con tal de
conseguirlo”. Por ello, “la importancia que se le está dando
a los puntos es máxima” para medirse a los portuenses “con
la intención de lograr tres puntos que nos lleven sin la
cabeza alta a Cuenca”, de ir a más, “para que aumente la
confianza en ellos y en mí”. De esa manera, en el equipo
caballa pretenden alcanzar la mentalidad adecuada para,
primero doblegar al Portuense, posteriormente hacer lo
propio con el Conquense y que las diferencias se reduzcan”
con respeto a la zona noble de la tabla.
Viendo la situación en que se encuentran en la
clasificación, los blancos se conformarían con clasificarse
para la próxima edición de la Copa del Rey. “Hombre claro,
podríamos si logramos 10 o 12 puntos, ahora mismo lo
firmaríamos todos”. Un consuelo que “sería quitarnos al
menos un mal sabor de boca”, incide.
En las cuatro jornadas que restan de competición, el
preparador jerezano entiende que se le presenta a los
jugadores una oportunidad para reivindicarse de cara a la
temporada venidera. Y es que, teniendo en cuenta la cantidad
de jugadores que finalizan contrato, en el club se pueden
plantear contar con alguno más de los que se renovarían a
día de hoy. Por ello, se presenta una buena ocasión para
“demostrar que todavía se puede confiar en alguno para el
año que viene”.
Hablando de jugadores y preguntado por el equipo que vaya a
poner en liza el próximo domingo ante el Portuense, Orúe ve
difícil que vaya a repetir once. “Yo siempre hago algún
cambio”, advierte. Eso sí, dejó constancia de que “estoy muy
contento con el rendimiento que dieron” en el último
partido. “Es lo que se pretende”, apunta. Valorando que
“estamos satisfechos de los que jugaron”.
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Fernando Abad podría ocupar la secretaría técnica
Desde que la directiva de la AD
Ceuta asumiera las competencias de José Enrique Díaz el
pasado mes de noviembre, en la entidad se dedicaron a
coordinar los diferentes frentes que con anterioridad
defendiera el sevillano. De esta manera buscaron ayuda en
colaboradores externos. Dentro de ese grupo de personas se
encuentra el que podría relevar a José Enrique Díaz en los
despachos de la entidad caballa, Fernando Abad, nombre que
ya adelantó El Pueblo de Ceuta. Quien durante las últimas
temporadas ejerciera de gerente en el Linares y que ha
trabajado por encargo del club.
Sobre su posible incorporación, el propio Fernando Abad ni
confirma ni desmiente nada, únicamente explica que lleva
teniendo conversaciones con la entidad caballa “desde hace
muchos años”, al representar a los clubes andaluces en la
Comisión de Segunda B. Cuando cimentó una buena amistad con
Cecilio Castillo, quien defendió los intereses del Ceuta.
Por ello, “no descarto para nada estar algún día en el
Ceuta”.
De concretarse su incorporación a la entidad caballa,
Fernando Abad llegaría para coordinar los aspectos
relacionados con el club y ser el eslabón entre la parte
burocrática y la parcela deportiva, una función que ya
desempeñó durante el mandato de Delfín Cañas en el club
linarense.
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