Los responsables de la Viceconsejería de Equipamientos
Urbanos y Dotaciones en Barriadas y la Federación Provincial
de Asociaciones de Vecinos (FPAV) mantuvieron en la tarde de
ayer una nueva reunión para trazar una nueva línea de
actuación en el apartado de mantenimiento. Entre las
novedades destaca el uso de los aljibes. Debido a que se han
convertido en estanques de aguas inutilizadas debido a la
modernidad en el sistema de suministro, durante la reunión
de ayer se valoró qué uso se les podría dar a la gran
mayoría, exceptuando a barriadas como Varela Valiño y
Bermudo Soriano, en los que debido a la falta de potencia,
las bombas de impulsión se hacen imprescindible para dar
cobertura a estas zonas de la periferia. En total son más de
16 aljibes los que quedan en la ciudad.
Otros temas tratados fueron: señalización horizontal y
vertical; pintado de zonas comunes, como grafitis o
mobiliario urbano; mantenimiento de los 35 locales sociales;
mantenimiento y pintura de los polideportivos; limpieza de
vaguadas y parterres, en las que participan las Brigadas
Verdes.
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