La empresa que se encarga de la gestión del puerto deportivo
de Ceuta, Marina Hércules, Sociedad Anónima (MAHERSA), sumó
ayer a su infraestructura el elemento que le faltaba para
acceder al negocio de la reparación de barcos de vela con la
llegada a la ciudad autónoma de la grúa motorizada que
permitirá sacar del agua y trasladar a tierra embarcaciones
de hasta 35 toneladas de peso y dieciséis metros de eslora.
El instrumento, de fabricación española y conocido en el
argot del sector como ‘travel-lift’, llegó la madrugada de
ayer al puerto ceutí y la noche pasada fue trasladado a su
ubicación en la zona de marina seca.
Marina Hércules, Sociedad Anónima (MAHERSA), la empresa que
se hizo cargo el 9 de mayo de 2006, hace ya casi tres años,
de la gestión del puerto deportivo de Ceuta, podrá sumar en
las próximas semanas a su lista de servicios a disposición
de los clientes del mismo los que le permitirá asumir la
nueva grúa motorizada, conocida en el argot náutico como ‘travel-lift’,
que desde la madrugada del lunes descansa en aguas del
puerto y que ayer por la noche fue trasladada a la dársena
deportiva previo corte del tráfico en el desdoblamiento de
las Palmeras.
Este instrumento, que ha exigido una “elevada” inversión de
la sociedad, facilitará a la misma acceder a la reparación
de barcos de vela y otras embarcaciones de mayor tamaño de
las que ahora podía atender en su marina seca. Según explicó
ayer el presidente del Consejo de Administración de Mahersa,
Nicolás Cabello, con la nueva grúa se podrán izar barcos de
hasta 16 metros de eslora y hasta 35 toneladas de peso.
Hasta la fecha el puerto deportivo disponía de una
carretilla elevadora que permitía trasladar a tierra
embarcaciones de no más de 7,5 toneladas de peso.
“Con la nueva grúa se podrá atender la reparación de barcos
de un tamaño considerablemente mayor”, explicó Cabello,
quien detalló que se espera que el mercado que más tirón
tenga a partir de ahora sea, por sus especiales
características, el de los barcos de vela, a los que se
podrá realizar la típica renovación de ánodos, limpieza de
fondos y cascos y colocación de patentes de protección.
El puerto deportivo dispone actualmente de “todos los
servicios necesarios” y de “modernas instalaciones al
servicio del mejor bienestar tanto de los propietarios de
los barcos como de sus embarcaciones”. “Mientras su barco
está en manos de profesionales y bajo vigilancia continua,
disfrute de todo un abanico de actividades recreativas y de
ocio”, reza la web corporativa de Mahersa como lema.
Al asumir la adjudicación de la gestión del puerto deportivo
Mahersa se comprometió a invertir en la remodelación de los
pantalanes y las torretas de suministros del mismo, así como
en la adquisición y prestación del servicio de un equipo de
varada y botadura con grúas pluma como la recién recibida y
cunas para varada. Igualmente, entre los planes ya cumplidos
o en proyecto de la sociedad figuraba la instalación de un
sistema de hibernaje en altura para barcos pequeños y la
implantación de equipos de limpieza, mantenimiento y
talleres.
La adjudicataria del puerto deportivo cerró el ejercicio del
año pasado con un incremento muy significativo de
aproximadamente 4.000 pernoctaciones de yates deportivos más
que en 2007.
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La nueva infraestructura permitirá poner en funcionamiento
las 66 nuevas plazas en seco
Mahersa esperaba desde hace casi
dos meses a que las condiciones meteorológicas en el área
del Estrecho fueran las idóneas para trasladar desde
Algeciras el ‘travel lift’ que permitirá recoger en el foso
de 18 metros de largo y 6 de ancho con que cuenta el puerto
deportivo los barcos y trasladarlos a tierra. De esta forma,
además de acometer las reparaciones de barcos se podrán
utilizar las 66 nuevas plazas en seco con las que tiene
previsto Marina Hércules ampliar la capacidad del puerto
deportivo. Los pantalanes del puerto deportivo disponibles
para las embarcaciones locales se encuentran completamente
llenos desde hace meses, ya que la empresa atiende
actualmente a unas 400 embarcaciones residentes en Ceuta,
además de los barcos transeúntes que llegan para un periodo
eventual. La inversión ejecutada en ambos proyectos roza los
300.000 euros y la singularidad de los nuevos espacios en
altura es que será para guardar en seco embarcaciones de
pequeño calado. En febrero ya existían 20 peticiones para
cuando se abra la posibilidad de contratar los nuevos
varaderos.
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