Una cosa es que la AD Ceuta no vaya a conseguir el ascenso
marcado a principio de temporada y otra bien distinta que el
conjunto caballa termine de mitad de la tabla hacia abajo.
En una campaña en la que los ceutíes han ido bajando el
listón a medida que han ido avanzando las jornadas,
conformándose cada vez con menos. Ya que, al comienzo del
campeonato, el objetivo pasaba por finalizar la temporada
regular en la primera posición de la tabla. Teniendo en
cuenta que esta campaña los líderes de los grupos de Segunda
División ‘B’ lo tendrán más fácil, al jugarse entre sí dos
de las cuatro plazas para Segunda ‘A’.
Viendo que la primera posición se ponía cada vez más cara,
al comprobar la supremacía del Cádiz, el listón se bajó
hasta situarlo en los otros tres puestos que dan derecho a
disputar las eliminatorias de ascenso. Sin embargo, a tenor
del ritmo impuesto por Real Jaén y Poli Ejido, la
mediocridad de los ceutíes les obligó a mirar únicamente a
la cuarta. Una posición que, a falta de siete jornadas para
el final de la competición, se había convertido en un
imposible. Y ahora, cuando quedan seis partidos para el
final de Liga, con los ceutíes a ocho puntos de la fase de
ascenso, situados en la décima posición de la tabla, el
objetivo será evitar que el conjunto caballa iguale la peor
posición de su historia en Segunda División ‘B’: el undécimo
puesto. Dos puntos por encima del Granada CF.
El peor registro data de la temporada 2006/07, cuando los
ceutíes sumaron 52 puntos, los mismos que Melilla, Écija y
Baza. En una campaña marcada por el titubeante inicio de los
blancos, quienes sumaron seis puntos en las primeras diez
jornadas. Lo que les mantuvo durante la primera vuelta en la
lucha por la permanencia. En la primera experiencia de
Felipe Escane en la presidencia y el jerezano Carlos Orúe en
la banda.
Algo similar a lo que sucedió en la 2005/06, en este caso
con Ernesto Valero, año de regreso de Orúe al banquillo
ceutí, tras la destitución de Ramón María Calderé. Campaña
en la que los blancos acabaron en décima posición, también
con 52 puntos. Los mismos dígitos que Mérida, Extremadura y
Marbella.
Con anterioridad, las peores clasificaciones de la entidad
caballa fueron dos séptimos puestos y una sexta posición.
Teniendo en cuenta que en la cinco experiencias restantes,
la AD Ceuta logró el objetivo de disputar la fase de
ascenso. Así los dos séptimos puestos los firmó en la
2002/03 y en la 1998/99, mientras que el sexto lugar lo
ocupó en la 2003/04. En la 1998/99, una séptima plaza
resultó meritoria, teniendo en cuenta que era su primera
temporada en Segunda ‘B’.
Atrás quedaron otros tiempos en los que la AD Ceuta era uno
de los equipos a temer de la categoría. Ya que, después de
haber jugado cuatro fases de ascenso en siete años, ha
pasado ha jugar una en los cuatro últimos. Tan sólo el
curso, pasado, cuando se alcanzó la segunda y definitiva
eliminatoria ante el Girona, los blancos hicieron reverdecer
viejos laureles.
Por ello, en la presente temporada, el único reto que les
queda a los ceutíes -ante la imposibilidad de alcanzar play
off de ascenso y puestos de Copa del Rey- los ceutíes
intentarán terminar en la posición más honrosa posible. Al
situarse en la décima posición, con dos puntos menos que el
Guadalajara, que es noveno, y dos más que un Granada CF que
es undécimo. Una zona templada de la taba a la que se ha
llegado tras acumular seis partidos sin conocer la victoria,
perdiendo ante Cádiz, Poli Ejido y Jaén, empatando con
Marbella, Balompédica Linense y Guadalajara. Lo que les
sitúa en tierra de nadie a falta de seis partidos para el
final de campaña.
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