El presidente de la Ciudad Autónoma, Juan José Imbroda,
instó al Gobierno central a que “se ponga a trabajar” por
solucionar el problema del transporte aéreo de Melilla, con
el objeto de que no desaparezcan más rutas y frecuencias y
disminuya el elevado precio de los billetes. Imbroda
reprochó al Gobierno socialista que “todavía no se haya
enterado después de 25 ó 30 años de que el transporte aéreo
es caro”, algo para lo que “no hace falta sentarse en un
despacho oficial para saber qué es lo que quieren los
melillenses”.
De hecho, invitó al Partido Socialista (PSME-PSOE) y a
Coalición por Melilla (CPM), además de al delegado del
Gobierno, Gregorio Escobar, que “también forma parte del
equipo” de dichas formaciones, a que “pregunten al primero
que pase por la esquina qué es lo que quieren los
melillenses” respecto al transporte aéreo.
Según Imbroda, la respuesta de los ciudadanos será unánime
porque “todos quieren que el transporte aéreo sea más
barato, asequible, y que haya unas comunicaciones rápidas y
fluidas, con la Península. En definitiva, quieren que no se
corten los destinos y que los aviones sean seguros y buenos,
como los que hay ahora”.
“¿Cómo es que el delegado del Gobierno está esperando a que
le digamos qué es lo que quieren los melillenses?”, se
preguntó Imbroda, quien continuó diciendo “a ver si se
enteran ya y se ponen a trabajar” para resolver el problema.
En este sentido, recordó que el Gobierno central “sí se ha
puesto a trabajar” en el caso de mejorar la conectividad de
Andalucía, para lo que ha dado el visto bueno a la
declaración de servicio público de la línea Almería-Sevilla
mientras se termina de construir la línea de AVE que unirá
ambas ciudades.
El mandatario local recordó que esa línea de servicio
público estará financiada con 12 millones de la Junta de
Andalucía, comunidad que “recibe impuestos transferidos del
Estado”, al contrario que Melilla.
Además, insistió en que cada kilómetro de construcción de
este tren de alta velocidad cuesta al Estado 27 millones de
euros, una cantidad muy elevada en comparación con “los dos
millones de euros que le pedimos aquí para el transporte
aéreo, que nos criticaron amargamente. Aún nos están dando
palos con eso”, espetó.
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