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La futura normativa, que será totalmente nueva y no una
reforma de la anterior, vendrá a sustituir a la vigente
desde 1985 y según Bibiana Aído, ministra de Igualdad,
“Incorporará lo más destacado del panorama internacional”.
Actualmente en España sólo es legal abortar en tres
supuestos: por violación, por graves defectos físicos del
feto o por peligro grave para salud física y psíquica de la
madre. Los dos primeros motivos se pueden esgrimir entre las
12 y 22 primeras semanas respectivamente y el último no
tiene límite temporal.
Aunque no se sabe con exactitud en qué consistirá la nueva
ley, lo que pretende fundamentalmente es despenalizar el
aborto durante las primeras semanas, dejando la decisión
libremente a la mujer sin tener que acogerse a ninguno de
los supuestos actuales. Para ello se está considerando
implantar una ley de plazos que es lo más habitual en el
resto de Europa, ya que son 27 los países que cuentan con
esta ley aunque con variaciones.
Sin embargo la cuestión ahora será determinar cuál será el
plazo legal en el que libremente se pueda interrumpir la
gestación. Mirando a Europa el plazo más amplio lo tiene
Holanda con 24 semanas y el menor, de 10 semanas, se sitúa
en países como Portugal, Turquía y Eslovenia. Otros ejemplos
son Suecia con 18 semanas y Francia o Alemania en los que se
puede abortar libremente hasta las 14 semanas. Malta se
sitúa como el único país en el que está prohibido el aborto
en cualquier caso e Irlanda sólo lo permite si existe un
grave riesgo para la madre.
Volviendo a España, para la elaboración de esta norma se ha
creado un comité formado por juristas, obstretas,
representantes de la salud femenina y miembros de los
ministerios de presidencia, justicia, sanidad e igualdad que
están elaborando un informe con recomendaciones al gobierno.
De momento éstas van encaminadas a implantar el libre aborto
hasta las 14 semanas y hasta las 22 en caso de anomalías
físicas o psíquicas en el feto o corra peligro la salud o
vida de la madre. Este informe junto con el de la
Subcomisión del aborto del Congreso de los Diputados serán
los utilizados para redactar un anteproyecto de ley que
según las previsiones estará listo para antes del verano.
Otro de los puntos más discutidos sobre la futura ley es el
referente a otorgar a las menores de 16 años la posibilidad
de interrumpir el embarazo sin consentimiento ni
conocimiento paterno. Estas menores están situadas en un
marco normativo muchas veces contradictorio. Pueden casarse
o trabajar por ejemplo, pero no comprar tabaco ni abrir una
cuenta bancaria. Estas incoherencias son las que están
planteando hasta que punto éstas chicas son suficientemente
maduras para tomar una decisión tan importante y el gobierno
parece estar estudiando la posibilidad de que finalmente la
nueva normativa contemple la posibilidad de abortar a los 16
años sin consentimiento pero sí con el conocimiento de los
padres, aunque de momento todo está en el aire.
Como complemento a todo esto el nuevo texto legislativo
incidirá en la información y prevención de los embarazos no
deseados y en la educación sexual. Muchos expertos han
destacado la importancia de la misma para reducir la elevada
tasa de aborto entre jóvenes y la necesidad de educar desde
las aulas y no en forma de charlas o pequeños talleres. De
hecho, países como Holanda o Alemania que presentan una
legislación muy permisiva sobre el aborto, registran a su
vez el numero más bajo del continente. Esto se podría deber
a que incluyen en sus planes de estudios la educación sexual
y tienen una visión mucho más pragmática del tema, habiendo
dejado el sexo de ser un tema tabú en las familias.
Principales reacciones y controversias.
La decisión del gobierno de crear una nueva ley ha reabierto
de nuevo el debate “aborto si, aborto no” que había quedado
cerrado en 1985 cuando se creó la ley que lo despenalizaba
en ciertos supuestos. Las reacciones adversas a ésta
declaración del ejecutivo no se han hecho esperar y son de
lo más variopintas.
La iglesia ha sido la primera y la que con más virulencia ha
atacado la legitimación de lo que ellos consideran un pecado
y un homicidio. De hecho la institución eclesiástica castiga
con la excomunión tanto a la mujer que aborta
voluntariamente como a los que se lo procuran. Para ello la
Conferencia Episcopal Española (CEE) ha lanzado una campaña
de comunicación en la que invertirán 250.000 euros en
carteles y vallas publicitarias en los que se proclama que
en España se está extendiendo cada vez más la “cultura de la
muerte” y que se protege más a un animal en peligro de
extinción que a un bebé. Este ha sido el primer paso de una
movilización que lleva aparejada muchas más ofensivas. En
las catedrales y parroquias se están celebrando liturgias a
favor de la vida, en la que se trasmite a los fieles la
necesidad de lo que ellos consideran apostar por la vida y
de que “la única justicia pasa por la custodia del niño que
va a nacer y por el apoyo integral a la madre”
Por otra parte y con la cercanía de la Semana Santa el
debate se ha trasladado a las cofradías uniéndose la mayoría
a la lucha de la Iglesia desde diferentes perspectivas.
Muchas han decidido colocar un lazo blanco en los palios o
cruces de guía o que todos los cofrades lo lleven en su
túnica como símbolo del rechazo al aborto y a favor de la
vida. No obstante esta no es una decisión uniforme al ser
considerada por muchos cofrades como una intromisión en
temas políticos que nada tienen que ver con la semana santa
y que podrían desvirtuar el verdadero significado de la
misma. La cuestión finalmente se ha dirimido dando libertad
a las hermandades y a sus miembros para lucir el citado lazo
simbólico. En lo que si están de acuerdo es en realizar
campañas informativas sobre el tema y en su rechazo del
aborto como cristianos.
Oposición y apoyo a la nueva ley
Pero no solo la Iglesia ha demostrado su oposición a esta
nueva ley. Organizaciones provida como Derecho a vivir,
Hazte Oir, Médicos por la vida y Grupo Provida Madrid han
convocado una manifestación que tendrá lugar hoy en Madrid
ante las puertas del Ministerio de Igualdad y que culminará
en las Plazas de las Cortes. Esta manifestación surge tras
la “Declaración de Madrid” que científicos e intelectuales
provida suscribieron, mostrando los motivos por los que se
oponen a la reforma de la normativa vigente. También el Foro
Español de la Familia, ha declarado a través de su
presidente su rechazo al aborto ya que es “la salida fácil
que el gobierno da a las embarazadas, dejándolas
abandonadas, susceptibles al chantaje emocional y laboral”,
considerando la normativa como un nuevo ataque de violencia
machista y defiende que “la única solución progresista es
proteger, siempre, la vida del no nacido”. Por supuesto el
Partido Popular también votó en contra de la aprobación de
esta norma que considera una cortina de humo para desviar la
atención de la crisis económica además de manifestar que es
innecesaria ya que no existe una demanda social de la misma.
Considera que “el aborto supone el fracaso de una sociedad”
y que las nuevas medidas son aberrantes por lo que no
descartan acudir al tribunal constitucional.
Pero no todo son críticas al gobierno. Desde el congreso, IU-ICV
y ERC, han ratificado su acuerdo con la decisión del PSOE,
acentuando que la ley de 1985 está obsoleta ya que no puede
garatizar la seguridad jurídica y médica de las mujeres y de
los profesionales sanitarios y además defienden que la mujer
debe poder interrumpir la gestación si le supone un
“conflicto social, personal o familiar”. Así Gaspar
llamazares ha declarado que este ley aprobada en el congreso
es éticamente moral aunque sea contraria a la Iglesia.
Por otra parte organizaciones como la Asociación de médicos
progresistas creen firmemente en el derecho último de la
mujer a decidir y aluden a la Conferencia de las Naciones
Unidas sobre Población Mundial realizada en Bucarest en 1974
en la que se cita: “Las parejas deben no sólo recibir los
conocimientos, sino también los medios necesarios que les
permitan el ejercicio de su derecho a determinar libre y
responsablemente el número y la frecuencia de su
descendencia, pues la planificación familiar no sólo es un
elemento del desarrollo social y económico de las naciones,
sino también un derecho humano fundamental”.
En la misma línea se sitúa la Plataforma por una Ley del
Aborto (PLA) formada por asociaciones feministas y mujeres,
que recuerdan, entre otras cosas, que el Consejo de Igualdad
de Europa ha aprobado por mayoría que el aborto es un
derecho de las mujeres. La presidenta de la asociación
feminista Alecrín, por su parte ha declarado que la campaña
contra el aborto que se está llevando a cabo es la
manifestación más pura del patriarcado y que la Iglesia
católica considera a las mujeres como seres inferiores.
ACAI (asociación de clínicas acreditadas para la
interrupción del embarazo) ha manifestado, a su vez, que el
aborto tiene que ser un elemento de garantía y no un delito
despenalizado, siendo ésta la única forma de solucionar la
situación de inseguridad jurídica de las mujeres españolas.
Por último y en lo que concierne a la opinión pública, ésta
parece estar a favor de una ley de plazos según las
encuestas del CIS de Julio, en el que el 64% se muestra
favorable a la misma.
A la espera del anteproyecto y del resultado de
manifestaciones como la que tendrá lugar hoy en Madrid, el
debate sigue abierto y la polémica cada vez mas encendida
promete más capítulos sobre la conveniencia o no de la
reforma legal.
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