La llegada imprevista de José Luís
Rodríguez Zapatero a la presidencia del Gobierno y la
adopción de su primera gran medida, salida de las tropas de
Irak abandonando a nuestros aliados, supuso la ruptura de
las relaciones bilaterales con Estados Unidos y por
supuesto, la cancelación de todos los convenios bilaterales
y contratos firmados con este país. Por tanto, es lógico
afirmar que los únicos damnificados con motivo de esta
crisis fueron las empresas españolas y con ellas, los
trabajadores españoles.
Aunque, también quedó seriamente dañada la valoración de
nuestro país a nivel mundial al romper unilateralmente el
compromiso existente con nuestros anteriores aliados no
obstante, la derrota republicana en las pasadas elecciones
norteamericanas se convertía en una nueva esperanza del
Ejecutivo socialista de poder cambiar la tendencia iniciando
una nueva etapa de alianzas que les diera un nuevo impulso.
No obstante, la adopción de otra precipitada decisión,
retirada de las tropas de Kosovo, ha significado reincidir
en errores del pasado.
Por tanto, podemos afirmar que los únicos argumentos que
inspiran a los ministros socialistas es la obtención de
beneficios políticos a través de la adopción de medidas
mediáticas que les haga recuperar la confianza del
electorado español tras el fracaso en las elecciones
gallegas aunque, estas irreflexivas decisiones originen
tensiones diplomáticas con nuestros aliados. Quizás, es
momento de recordar que La Organización del Tratado del
Atlántico Norte es una organización internacional política y
militar creada con el objetivo de organizar Europa ante
cualquier amenaza exterior.
No obstante, es oportuno recordar en relación a las
decisiones adoptadas por los socialistas españoles, a lo
largo de nuestra corta historia democrática, respecto a esta
organización, la histórica campaña liderada por los
socialistas españoles manifestándose en contra de nuestra
permanencia en la OTAN cuando eran oposición y su cambio
radical cuando, presidiendo el Gobierno, convocaron el 12 de
marzo de 1986 un controvertido referéndum sobre nuestra
permanencia en la OTAN apoyando descaradamente el voto
afirmativo.
En definitiva, decisiones adoptadas en diferentes momentos
de nuestra historia por los dirigentes socialistas
argumentadas exclusivamente en el interés partidista alejado
totalmente del interés general que demuestran el verdadero
significado de la ideología socialista. Los españoles nos
merecemos un Gobierno reflexivo que situé a nuestro país en
el lugar que le corresponde con el único objetivo de
alcanzar el bienestar general de todos los ciudadanos sin
exclusión alguna.
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