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En el seno de la AD Ceuta son conscientes de la dificultad
que entraña reflotar la nave caballa. Una realidad que no
pasa desapercibida en la directiva blanca, donde su
presidente, Felipe Escane, es el primero que ve negro el
volver a jugar la fase de ascenso. Así, sin paños calientes,
el máximo mandatario reconoce que “hay que ser realistas”.
Explicando que, “primero, mientras hay vida, hay esperanza.
Y segundo, está muy difícil, así de claro”. Más si cabe,
“después del partido de anoche (por el pasado miércoles)”.
Esgrimiendo que, “sinceramente, ¿a quien puedo venderle la
moto que el equipo está bien?. Primero me lo tengo que creer
yo, y yo no me lo creo. Así de claro”, sentencia.
Dando la cara una vez más, cuando las cosas no vienen bien
dadas, y arrecian las críticas, valorando que “en lo
deportivo acepto que el equipo no está bien, que si al final
no nos metemos en ‘liguilla’, será un fracaso deportivo”.
Y es que, en los momentos difíciles, Felipe Escane entiende
que “es más fácil hacer leña del árbol caído”.por lo que,
llegado este punto, “aquí estamos nosotros para, como hemos
hecho siempre, dar la cara”.
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