Un hombre de 68 años ha encontrado la muerte entre las rocas
de Punta Blanca al resbalar y golpearse la cabeza cuando, al
parecer, pretendía buscar una mejor posición para la pesca.
Los aparejos junto al cadáver y la indumentaria revelaban un
suceso fortuito.
“Un mal golpe”. Así definía un agente de la Benmérita el
hecho que ayer conmocionó a la familia de B.B.H de 68 años,
pescador de afición y que encontró la muerte al resbalar
entre las rocas de Punta Blanca mientras intentaba hacerse
con un mejor lugar para pescar.
La Guardia Civil fue alertada ante la presencia de un cuerpo
entre las rocas costero marítimas de Punta Blanca. Allí,
efectivamente, sobre las 16’30 horas se hallaba el cuerpo de
este hombre de 68 años caído lateralmente, al que se le
apreciaba, por la posición de la caída y el fuerte golpe, un
sangrado por la zona parietal derecha que, además,
permanecía sin pulso. El lugar del suceso, de complicado
acceso, obligó a que los bomberos, una vez dictado por el
juez, levantaran el cuerpo.
Las muestras de dolor y de conmoción no se hicieron esperar
una vez llegados hasta el lugar del siniestro miembros de la
familia del infortunado pescador. En espera de la autopsia
ordenada por el juez, el cuerpo permanece en el anatómico
forense, aunque las primeras apreciaciones indican que la
muerte le sobrevino por el impacto de la cabeza contra las
rocas.
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