|
Ceuta celebró ayer el Día Mundial del Teatro Infantil y
Juvenil en una semana que la Consejería de Educación,
Cultura y Mujer ha utilizado el auditorio del IES Siete
Colinas para la representación continuada de obras por parte
de los propios niños y el Museo del Revellín para acercar
las bambalinas al público.
La Consejería de Educación, Cultura y Mujer de la Ciudad
Autónoma conmemoró ayer el Día Mundial del Teatro Infantil y
Juvenil con un buen número de actividades. Así, la consejera
Mabel Deu, visitó por la mañana la exposición Detrás del
telón: el revés de la trama, que se está llevando a cabo en
el Museo del Revellín.
Deu destacó el papel que ha tenido la Guía Educativa Ceuta
te Enseña en la participación de 26 centros en la IX Muestra
de Teatro Infantil y Juvenil y se congratulo que cada año
“más colegios se sumen a esta celebración”, que, según
recordó la consejera de Educación, Cultura y Mujer, supone
un esfuerzo adicional para niños y padres.
Asimismo, Deu recordó que la exposición del Museo del
Revellín permanecerá abierta hasta el día 28. “Una monitora
experta va guiando por la exposición para que vean lo que no
se ve en el teatro, lo que queda detrás del telón”, por lo
que la consejera invitó a los ciudadanos a que la visiten.
Deu recordó que las actividades en relación con el teatro
juvenil finalizará con una fiesta el próximo miércoles con
la entrega de trofeos-muestra para todos los niños,
profesores y comunidad educativa que han participado en la
Muestra de Teatro Infantil.
“El objetivo es incentivar el carácter lúdico del teatro y
de la educación desde otro punto de vista”, concluyó la
titular del área de Cultura y Educación de la Ciudad
Autónoma.
Por la tarde, Álvaro Moreno, quien participa en el Taller de
Teatro Arte, dio lectura en el auditorio del Siete Colinas
al Manifiesto del Día Mundial del Teatro Infantil y Juvenil
que este año ha redactado el brasileño Augusto Boal.
Boal, teatrólogo que ha desarrollado el denominado método
del teatro del oprimido, ha destacado en su Manifiesto que
el lenguaje dramatúrgico es el “más potente” y el “más
creativo”, ya que “es la suma de todos los lenguajes:
palabras, movimiento, colores, música, realidades y sueños,
emociones e ideas”.
“Con la práctica del teatro también aprendemos que el mundo
puede hacerse mucho mejor de lo que es”, leyó Moreno, ya que
“en el presente podemos pensar en el pasado e inventar el
futuro”.
“Teatro es diálogo”, declamó, porque “no se puede actuar
solo, en un desierto”, en tanto que “se necesita un
compañero con el que actuar y son necesarias personas que te
observen”. Por ello, “el teatro es solidaridad: hay que
actuar juntos”.
|
celebración
