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sucesos - MARTES, 17 DE MARZO DE 2009


edificio de los juzgados de ceuta. ep.

tribunales
 

La UDYCO contó con apoyo de la Jefatura en el rastreo del coche que partió del Molino

Los agentes confiesan haber participado en la
vigilancia y detención de los dos acusados que supuestamente transportaban la droga
 

CEUTA
Cristina Marzán

ceuta
@elpueblodeceuta.com

En la quinta sesión del juicio que determina la supuesta trama de narcotráfico de la calle Molino intervinieron, en calidad de testigos, tres agentes de la Policía Nacional, y el padre y la esposa de uno de los cuatro acusados. Los policías reconocieron a dos de los imputados manifestando haber participado en la vigilancia y detención de los mismos.

Para iniciar la quinta sesión del juicio que aborda la presunta trama de narcotráfico de la calle Molino, con la intercepción de 171 kilos de hachís en un vehículo albergado en el garaje de un hotel de la ciudad, acudieron en calidad de testigos tres agentes de la Policía Nacional.

Los tres confirmaron la intervención de este cuerpo en el operativo; dos de ellos estuvieron en el seguimiento del vehículo que partió de la calle Molino y se adentró en el garaje; ambos, detenidos en las inmediaciones del Paseo de Las Palmeras. “Estábamos realizando otras gestiones cuando por radio nos avisaron para incorporarnos al dispositivo. Íbamos de paisano en un coche camuflado y guardando las distancias así que no nos pudieron ver. Seguimos al coche desde Pasaje Recreo, pasando por Gran Vía y el Paseo de las Palmeras. Nos ordenaron que estuviésemos cerca de la Plaza de la Constitución y ayudamos en la detención de los dos acusados”. Con lo cual se confirmó que en el seguimiento participaron dos vehículos: UDYCO y Policía Nacional. Los tres declararon ser agentes en prácticas y que toda su intervención fue ordenada por el inspector jefe, sin acceder a toda la información del caso y sin explicar el porqué en el atestado no se recogían algunos datos que ellos mismo habían firmado.

Una de las agentes explicó su presencia en la vigilancia del domicilio y reconoció haber visto con las maletas a dos de los imputados, los que resultaron ser los que transportaban la droga. Con una respuesta exacta, en diferentes tiempos, ninguno de ellos vio que el jefe del operativo hablase en privado con uno de los acusados y que tampoco escucharan algún trato para facilitar la salida de la comisaría de los familiares detenidos.
 

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