Puede ser un buen método para que
en momentos sucesivos no se vuelva a dar, como se dio el
pasado año, por estas fechas.
Competencia, o mejor dicho, la Comisión Nacional de la
Competencia va a incoar expediente sancionador contra las
navieras Balearia, Buquebús, Acciona y Euroferry, por
presuntas, siempre presuntas, conductas prohibidas.
Y es que fue llamativo que en los mismos días, cuando
comenzó, o iba a comenzar una mayor afluencia de pasajeros,
todas y cada una de ellas pensaron que había llegado el
momento de “hacer caja”.
El Gobierno de la Ciudad Autónoma, no podía ser de otra
forma, se dio cuenta de que las ofertas que venían
manteniendo concluían en las vísperas de las vacaciones de
Semana Santa, con lo que ya tenía en su mano la posibilidad,
y así lo hizo, de acusar a las compañías que, entonces,
hacían la travesía Ceuta – Algeciras y a la inversa.
La denuncia lleva casi un año. Fue en mayo del pasado 2008.
La Comisión Nacional de la Competencia llevó a cabo sus
investigaciones y ahora sabemos que hay una manifestación en
estos términos:” de la información obtenida puede deducirse
que existen indicios racionales de la comisión de una
infracción ... de fijación de precios”.
Esta es la conclusión, pero ¿En qué va a quedar todo, cuando
se ve que hubo “prácticas restrictivas de la competencia?”.
El Gobierno de la Ciudad, a finales de abril del pasado año
tenía clara la existencia de “prácticas concertadas y
conscientemente paralelas” en sus políticas de precios.
Es lo que veía la Ciudad Autónoma y su presidente dio orden
de iniciar acciones por lo que llamó “alarma social generada
ante la subida generalizada de las tarifas a mediados de
marzo, entre los días 14 y 17.
Quedaban claras las consecuencias para Ceuta y es que cuando
estábamos en plenas vacaciones de la Semana Santa, la
reducción de visitantes a la ciudad fue notable.
Se había dado una más de las muchas circunstancias que
partiendo de las navieras afectaba a ceutíes que querían
salir fuera de la ciudad o a potenciales visitantes, desde
el otro lado del estrecho que, por los elevados precios,
prefirieron quedarse en la Península, en vez de venir a
Ceuta.
Y que desde la Ciudad se había dado en plena diana nos lo
demuestra el hecho de que por ambas entidades se llega a
unas conclusiones similares:” La conducta contraria a la
competencia obedecería a un pacto previo no escrito, una
práctica concertada o, cuando menos, una práctica
conscientemente paralela de las navieras denunciadas...”.
Elementos que están ahí, apreciaciones que coinciden,
viajeros que se quedaron al otro lado del estrecho o, que no
salieron de aquí, pérdidas en establecimientos hoteleros o,
mejor dicho, no ganancias que podrían haberse dado ... .
Todo muy bien, pero ¿Qué compensación va a haber para los
afectados?.
Ahí es donde está la situación a analizar, porque si imponen
a las navieras una sanción económica, eso va a favorecer muy
poco o nada a los clientes, a los que lo fueron o a los que
podrían haber sido.
Eso en nada favorece a los hoteles que se quedaron con el
50% menos de clientela. La situación fue mala, la enmienda
...
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