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La Asociación de Agencias de
Desarrollo Regional de España, en la que se encuentra la
sociedad de fomento Procesa, ha formulado una declaración
institucional tras su última reunión en Valladolid para
promover “ante el escenario de incertidumbre económica
existente” el tejido empresarial especialmente constituido
por las pequeñas y medianas empresas del país. Clara apuesta
por la innovación y la internacionalización como fórmula
para alcanzar una mayor competitividad y un modo de hacer
mejor frente a las actuaciones económicas que sucedan en el
futuro. Las agencias de desarrollo estimularán la inversión
empresarial empleando los fondos disponibles para
inversiones. De tal modo, y en esto lleva su pate alicuota
Procesa, las agencias españolas de desarrollo regional
destinarán más de 1.100 millones de euros en apoyo directo a
la inversión.
Evidentemente las Pymes son el objetivo prioritario de este
eje estratégico dada la capacidad de este concreto sector
empresarial para dinamizar realmente el país. A nadie escapa
el hecho de que las Pymes constituyen la base fundamental
para el funcionamiento del mercado, fomentan la competencia
y, entre otras cuestiones, contribuyen a la dispersión del
riesgo. En definitiva, es de libro saber que las Pymes
contribuyen a un mayor desarrollo y equilibrio regional.
Son, las Pymes, un soporte básico de la economía y,
constrituyen un trascendente factor de estabilidad social
por el número de empleos que mantiene.
Por tanto parece obvio encontrar esfuerzos de apoyo a un
sector cuando, pese a todo lo que es capaz de ofrecer en
cuanto al dinamismo económico de un país, se enfrenta en
situación de desventaja respecto de las grandes empresas por
su menor dimensión.
El aporte de las Pymes a la sociedad y a la economía no deja
lugar a dudas. La decisión adoptada en declaración
institucional de la Asociación de Agencias de Desarrollo
pone el dedo en la llega del verdadero camino para la
recuperación económica del país.
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OPINIÓN / EDITORIAL
