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OPINIÓN - DOMINGO, 8 DE MARZO DE 2009

 

OPINIÓN / LAS NOTAS DEL QUIM

Una de toros y toreros


Quim Sarriá
quimsarria@elpueblodeceuta.com

 

Tras los días tormentosos, pero menos que en el resto del país, que hemos pasado, entro en una mañana más en que me levanto alegre justo cuando el Sol muestra las puntas de sus luminosos cabellos por el horizonte.

Ya sé que al menos hay alguien que se siente molestísimo porque me levante alegre y contento… ¿por qué no puede uno levantarse alegre y contento? No puedo decirle a ese alguien que se joda, porque no lo conozco personalmente y sin embargo se que es alguien con el estómago muy mal puesto por la de cabreos personales que tiene y que suele plasmarlos en el periódico.

Hace dos días que he realizado un viaje relámpago, hoy día cualquier viaje es así, precisamente a un sitio donde los relámpagos disparan a mansalva y donde los toros aguantan como estatuas los chaparrones.

En el cafecito del pueblo, café para todos según su edil, nos reunimos algunas personas interesadas en el meollo arquitectónico –por la parte técnica, no especuladora- para trabajar en un proyecto de viviendas unifamiliares aisladas. Una bendición de Don Dinero, porque en estos tiempos de crisis siempre son bienvenidas las solicitudes de proyectos de construcción. Ahora está por ver si éstos llegan a buen término, porque son demasiadas viviendas inacabadas las que tenemos en cartera por falta de liquidez de los propietarios.

Entre plano y plano sacamos una especie de tertulia con algunos lugareños, casi todos gente jubilada hace tiempo, en la que predominó el mundo de los toros.

No soy aficionado a ese arte. Estoy más a favor del pobre toro que de la supuesta valentía del torero, ver sufrir al astado desde que sale del corral con la pegatina esa clavada en el lomo hasta que cae en una larga agonía…

La decadencia del toreo, al menos en Catalunya, es patente y la cosa podrá ir a menos, cuando comience la temporada, ante la postura de muchos partidarios de anular las corridas.

Uno de los tertulianos, hombre ochentón pero de una vitalidad desconocida en el ser humano, recuerda que siempre acudía a toda corrida de toros que se organizaba, sea en tientas o en plazas de ciudades o pueblos. Llevaba consigo su bota de vino gandesano, su puro caliqueño que molestaba a los que fumaban habanos, su pan con chorizo de pueblo de entonces (con el pellejo auténtico de tripa de cerdo y no de plástico como los de ahora) y la correspondiente munición para arrojarla al torero que fallaba más de la cuenta: un tomate madurísimo. Cuando era un buen día en que el torero y el toro ofrecían un buen espectáculo, se zampaba el tomate, no lo tiraba.

Solo he asistido a lo largo de mi vida a una corrida de toros, hace mucho tiempo, muchísimo, pues tenía diez años cuando acudí llevado por mi padre. Era en un coso taurino que montaron en Ceuta, allá por 1957, y obviamente no puedo dar nombres de toreros ni de toros con su peso. Solo recuerdo que el toro parecía una bolsa de hemoglobina con más agujeros que un colador. Espero que esta comparación no levante la ira de alguien sabihondo que venga a replicarme que se trata, la hemoglobina, de una heteroproteína sanguínea de peso molecular 64 kD y de color rojo. Ya lo se.

Otro de los contertulianos ocasionales suelta la noticia de que Camino y Tomás han devuelto las medallas de oro de Bellas Artes al Gobierno porque no están de acuerdo con que la hayan concedido a Rivera. Pregunto quienes son y mirándome como si miraran a un extraterrestre me contestan que son Paco Camino y José Tomas, que el otro es Francisco Rivera…

Bueno, si quieren devolver las medallas están en su derecho, puede que importe un pimiento esa acción que sólo demuestra envidia malsana. Esa acción habla bien de cómo son esos toreros. ¡Así va el país! Con la envidia y el rencor por bandera. Malo, malo de veras.

Llego al momento en que me toca estar con mi hijo pequeño. Le he prometido que iremos al Aquarium de Barcelona porque está empeñado en conocer personalmente al sr..Tiburón. De toros no quiere saber nada. Me dice que ya tendrá tiempo de ver “a las mujeres” de los toros cuando vaya a Colonias
 

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