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“La prevención y el sentido común” seguirán primando, según
el director Provincial de Educación, a la hora de decidir la
suspensión de las clases ante situaciones de situaciones
climatológicas adversas como la del pasado jueves. La
comunidad educativa se felicita por la decisión de las
autoridades al entender que se han evitado males mayores.
La perspectiva del paso del tiempo y la comparativa con
otros territorios ayudan a ver que una decisión ha sido
equivocada o acertada. En este sentido, el acuerdo
interinstitucional para la suspensión de las clases el
jueves ha acabado resultando una buena medida. El presidente
de la Federación de Asociaciones de Madres y Padres de
Alumnos (FAMPA) de Ceuta, Jorge Guerrero, consideró que
“merece la pena por evitar males mayores, a pesar de que
trastoque la jornada laboral paterna”.
El director provincial de Educación, Aquilino Melgar,
explicó que no existe una normativa concreta que indique las
circunstancias que deben darse para decretar la suspensión
de las clases por causas climatológicas. Es por ello que a
la hora de decidir ha imperado “la cordialidad, el sentido
común y el interés general”. Este explicó que la idea partió
del presidente de la Ciudad quien decidió proponer esta
medida a la Delegación del Gobierno en vista de los datos
aportados por Protección Civil y Bomberos. La entidad de la
plaza de los Reyes y la Dirección Provincial apoyaron la
iniciativa.
Melgar se refirió a lo ocurrido en Melilla, donde se vivió
un temporal de similares características y donde no se
estableció la suspensión de la jornada lectiva. Así, unos
seis alumnos resultaron heridos en un centro al caerles
encima material desprendido del edificio. “Afortunadamente
no hemos tenido que lamentar ningún suceso de este tipo”,
comentó.
El director provincial reseñó asimismo la sintonía existente
entre Ciudad y Delegación en Ceuta. Algo realmente
importante a la hora de decidir, sobre todo cuando no hay
una normativa precisa y clara.
El presidente de la FAMPA se mostró de acuerdo con la medida
tomada y se felicitó por no tener que lamentar ningún
herido.
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La medida evita una desgracia en el IES Clara Campoamor
Son suposiciones, pero con toda
probabilidad se evitó una desgracia en el instituto Clara
Campoamor. La decisión de suspender las clases en Infantil,
Primaria y Secundaria ha sido, a todas luces, una medida más
que acertada. El viento azotó con virulencia por toda Ceuta.
Su acción fuerte y continuada durante la noche del miércoles
y la jornada del jueves provocó el levantamiento y posterior
caída de unas láminas de aluminio adosadas a la fachada y
componentes de los ventanales del edificio. Según explicó el
director del instituto, León Bendayán, su desprendimiento se
produjo el jueves en la hora cercana al recreo por lo que se
podría pensar en lo peor si no se hubieran cortado las
clases. Los bomberos estuvieron haciendo comprobaciones
durante la tarde del jueves y finalmente se dio el visto
bueno para reanudar las clases ayer.
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