Se cumplieron las previsiones de la alerta Naranja y Melilla
se vio azotada ayer por fuertes vientos de Poniente, con
rachas superiores a los 93 kilómetros por hora, que tuvieron
no pocas consecuencias en la ciudad.
Entre estas incidencias destaca lo ocurrido en el Colegio
España, cuando sobre la una de la tarde una ventana de la
clase de 5º B se desprendía de sus anclajes arrastrando
parte del muro, provocando "algunas lesiones leves a seis
alumnos", de los cuales dos fueron trasladados al servicio
de Urgencias del hospital Comarcal. A los pequeños se les
trató de heridas superficiales y algunas contusiones.
Además, otros "cuatro fueron llevados posteriormente por sus
propios padres sin que se les apreciara lesiones
importantes.
Todos han sido ya dados de alta", detalla la Dirección
Provincial de Educación.
Hasta el centro docente se desplazaron con celeridad los
equipos de emergencia, así como el delegado del Gobierno,
Gregorio Escobar, y el director Provincial de Educación,
Miguel Heredia, para interesarse por el estado de los niños
y la profesora, comprensiblemente asustados por lo vivido.
La Delegación ha puesto a disposición de los pequeños y de
sus padres la atención de un psicólogo que se encargó de
tranquilizar a los afectados.
Asimismo se anunciaba que la Dirección Provincial de
Educación había organizado los trabajos de reparación de la
ventana desprendida y ordenado, para esa misma tarde, el
refuerzo del resto de ventanales de todo el colegio.
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